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miércoles, 31 de agosto de 2011

Limas y limones


Por Tania Quintero, Lucerna

En Europa, a los limones verdes, como los de la foto, les llaman "limas". En Cuba, por lima se conoce a una fruta de menor tamaño que una naranja y más grande que un limón, de cáscara verde y bastante insípida. Las "limas" vendidas en Suiza provienen de Costa Rica, México, Brasil y Colombia. Para los europeos, si las naranjas tienen que ser anaranjadas, los limones tienen que ser amarillos.

A falta de limones criollos, los que siempre usaba en La Habana, en Suiza prefiero las llamadas "limas".

Hablando de limones, en 1968 el cantante venezolano Henry Stephen vendió más de un millón de discos con Limón, limonero . En 2009, lo cantó en versión salsa junto a Oscar de León .

En el blog de Valentina Quintero encontré que el autor de Limón limonero es Johny Quiroz. Según una información encontrada en internet, Quiroz fue el seudónimo utilizado por Juan R. Camacho Camacho, nacido en Costa Rica y ciudadano venezolano desde 1955.

martes, 30 de agosto de 2011

La moral es una sola


Por Tania Quintero (escrito en 1998)

Si algo no se puede encasillar en una ideología o creencia religiosa es la moral. Tampoco tiene nacionalidad ni jerarquía. Por el contrario, mientras más responsabilidades se tienen más debe prevalecer la moral.

El escándalo sexual en torno al presidente Bill Clinton, trajo a debate un tema tan viejo como el mundo: el de la moral de los ciudadanos.

En la isla, donde en las últimas décadas ha predominado la hipocresía o doble moral, el tema tuvo actualidad. Hay quienes piensan que porque las cosas anden mal económicamente y el robo se haya convertido en algo común en la mayor de Las Antillas, debemos contribuir al desorden y al descontrol.

El asunto es complicado y tiene sus aristas porque la sociedad cubana, aunque desde lejos puede verse como uniforme, única, totalitaria, interiormente está subdividida como un anón, una fruta hace años desaparecida.

Está, por un lado, la "moral de los revolucionarios", por otro, la de los supuestos "contrarrevolucionarios" que no son más que opositores, personas que han tenido la osadía de disentir. Y en el medio, como un gran islote, la moral de la gente, indiferente o incondicional al sistema, y donde se producen los mayores contrastes.

En ese islote, en el delito y la ilegalidad suelen darse la mano funcionarios y trabajadores, independientemente de su posición política o si son militantes o no del partido o la juventud comunista.

Sea la sociedad que sea, dirija quien dirija, hágalo bien o mal, las personas deben cumplir un mínimo de requisitos ético-morales. No para quedar bien con nadie ni con ningún santo, sino con uno mismo.

Porque alrededor de uno todo el mundo esté robando, no se debe robar. Porque la corrupción se generalice por día, uno tiene que tratar de no corromperse. Porque el método del soborno se extienda cada vez más, no se puede sobornar a nadie ni dejarse sobornar. Porque una parte de la población partícipe en actividades fraudulentas y delictivas, uno no debe sumarse a la comparsa del relajo.

La moral debe ser una sola. Se sea lo que se sea y se viva donde se viva.

Publicado en Cubafreepress el 10 de septiembre de 1998.

lunes, 29 de agosto de 2011

El talento no tiene edad


Por Carlos Boyero, Madrid

Alfred Hitchcock, aquel hombre que sabía todo del cine, aconsejaba a los aspirantes a directores que no trabajaran nunca con niños, ni con perros, ni con Charles Laughton. Imagino que a los perros les dirige su adiestrador. Su aversión hacia Laughton supongo que era un problema de egos descomunales entre dos hombres gordos, feos y geniales. Además, Laughton demostró detrás de la cámara en la maravillosa La noche del cazador que podía contar historias tan angustiosas y extrañas como las de su paisano.

Respecto a su aversión a dirigir criaturas, hay que agradecer a muchos directores que no tomaran en serio su advertencia. De haberla seguido nos hubieran privado de algunos de los momentos más conmovedores de la historia del cine.

No hubiéramos sabido de la existencia de Jackie Coogan en El chico, aquel precioso golfillo que gemía desconsolado cuando la policía pretendía separarlo de Charlot, del hombre que le había adoptado. También nos hubieran privado de la gracia y el encanto de Tatum O'Neal en Luna de papel, los misteriosos ojos de Ana Torrent en El espíritu de la colmena, el desarmante desparpajo de Drew Barrymore en E. T., el extraterrestre, los entusiastas gritos iniciales de Abigail Breslin y su subversivo baile final en Pequeña Miss Sunshine, la inocencia y el asombro de Anna Paquin en El piano, el maquiavelismo y la capacidad para la mentira de los niños de Viento en las velas, la épica y dolorosa supervivencia de Christian Bale en El imperio del sol, la agreste y adorable hija del abogado Atticus Finch en Matar un ruiseñor. Tampoco hubiéramos disfrutado del precoz e inmenso talento de Jodie Foster y de Judy Garland. La lista sería exhaustiva. Y, evidentemente, también han aparecido múltiples niños en la pantalla que por culpa del director, de lo que tienen que hacer y decir o de su personalidad despiertan instintos asesinos. Y doblados, más.

Si el arte es reconocido con premios, sería absurdo hacer distinciones entre niños, adultos y viejos.

De las mejores cosas que le han ocurrido al cine español de los últimos años es la frescura, la complejidad, el dramatismo, la ternura, la imaginación, la credibilidad o el desamparo que le han aportado actores y actrices infantiles de los que no sabíamos nada, de los que se han enamorado la cámara y el público. Consecuentemente, se ha galardonado su trabajo con goyas a interpretaciones que suponen una revelación muy grata. Ocurrió, entre otros y otras, con Juan José Ballesta, Andoni Erburu, Nerea Camacho, Marieta Orozco, Ivana Baquero, Marina Comas y Francesc Colomer.

Pero han decidido por razones entre legalistas y dadaístas suprimir los premios a los histriones infantiles. ¿O tal vez se debe al muy humano mosqueo de actores adultos, que a pesar de llevar toda su existencia en la profesión no logran jamás ser una impresionante revelación para los votantes de la Academia? Y entiendes que gente sabia y con múltiples conocimientos de psicología infantil debe velar porque las vulnerables criaturas no se vuelvan locas a edad tan temprana con eso tan seductor de la fama, la adulación y el dinero.

Que el repentino estrellato puede alterar la evolución sensata de niños que deben hacer las cosas que hacen los niños. Que transformarse en una mina de oro puede alentar la codicia de agentes y familiares. Que puede resultar insano pasar la edad de la inocencia delante de los focos y representando a otros. Que debe ser muy duro enfrentarse de adulto al fracaso cuando todo ha sido triunfo y popularidad en la niñez.

Pero mientras haya historias cinematográficas que hablan de la infancia se necesitarán actores y actrices de esa edad. Y entrarán en un mundo competitivo. Negarles los premios porque son pequeños resulta mezquino, paternalista, anacrónico.

El País, 24 de junio de 2011
Foto: Jackie Coogan, actor de El chico, en un fotograma de 1922.

domingo, 28 de agosto de 2011

Santiago de Cuba: Luchando por la vida


Este video, de 12.39 minutos, es una versión resumida de uno de los seis documentales que forman parte de la serie Todo el mundo es música, realizada en seis países (Cuba, México, Argentina, Perú, Honduras y Belice) por la cineasta española Patricia Ferreira y estrenada en TVE en 2011. El documental completo dura 1 hora y 9 minutos y lo pueden ver aquí.

sábado, 27 de agosto de 2011

El suicidio entre los cubanos


Por Luis Manuel García, Madrid

Licenciada en Historia y en Sociología por la Universidad de La Habana, con un doctorado en Sicología por la Universidad de La Habana, y una maestría en Trabajo Social por la Escuela de Trabajo Social de Barry University de La Florida, Maida L. Donate ha trabajado en temas como la metodología para el estudio de las condiciones materiales de vida y la sociedad civil en Cuba, y el suicidio, tanto en la Isla como en Miami. Sobre este último publicó un libro y una excelente colaboración en el dossier temático de la revista Encuentro de la Cultura Cubana (No. 45/46, 2007).

Trabajó en Cuba con el antropólogo norteamericano Oscar Lewis entre 1969 y 1970. Ha realizado investigaciones para el Instituto Cubano de Investigación y Orientación de la Demanda Interna (ICIODI) entre 1983 y 1993, y para el Instituto Nacional de Investigaciones del Trabajo (INIT) entre 1977 y 1983. Ha colaborado en el diseño de una metodología para evaluar y monitorear la efectividad de programas de entrenamiento para el Banco Interamericano de Desarrollo.

Profesora invitada en la Universidad de La Habana, en la Organización Panamericana de la Salud y en el Instituto Cubano de Epidemiología, ha formulado y gestionado programas de intervención centrados en la salud y la pobreza; la orientación y asesoramiento de jóvenes en situación de riesgo en un Programa de Empoderamiento del Vecindario, del Consejo Nacional Cubanoamericano para la prevención de la delincuencia juvenil en el Condado de Miami-Dade; en el Programa Comienzo Saludable, de apoyo a las mujeres embarazadas y familias con niños menores de tres años, y para los Servicios de Migración y Refugiados, ayudando a los menores recién llegados no acompañados, y sus familias.

Con esas credenciales, no será la última vez que Maida L. Donate nos visite. Pero en esta ocasión hemos querido preguntarle por un tema que ha tenido gran repercusión en la sociedad cubana desde sus inicios, y que durante el último medio siglo se ha manejado en la Isla con gran secretismo: el suicidio.

Durante todo el siglo XX, Cuba presentó tasas de suicidio muy superiores a las del resto de América, y comparables con las más altas del mundo, las de países como Hungría, Austria, Dinamarca, Suiza, Alemania, Finlandia, Francia, Japón y Suecia. ¿Existen factores en nuestra idiosincrasia o nuestra cultura que expliquen estos índices, contra la noción de alegres, abiertos y gozadores que tenemos de nosotros mismos?

-Cuando hablamos de tasas de suicidio, es preferible hablar de “tendencias”, porque no siempre los datos estadísticos son tratados con el mismo rigor todo el tiempo en todos los países. Se puede decir que los cubanos somos ontogenéticamente impulsivos y emocionalmente nos movemos en extremos, nos cuesta lograr un centro de equilibrio. No afirmo que somos el único grupo nacional que tiene esa característica, solo digo que estamos entre los grupos que la tienen. El suicidio es una respuesta a un desbalance que siente la persona entre un conflicto que debe enfrentar y su solución. Si la persona siente que, en su balanza emocional, el conflicto pesa más que la solución, se le nubla la capacidad de razonar, no ve la salida al problema y actúa por impulso. La relación intento suicida / suicidio consumado, 8-10/1, pudiera ser muestra de la impulsividad latente en todo suicida.

Contra una proporción de 3-4 hombres suicidas por cada mujer en Occidente, en Cuba este índice tiende a igualarse, algo que solo sucede en algunos países asiáticos, en los cuales, curiosamente, también es frecuente el suicidio por fuego, recurrente entre las mujeres cubanas, al contrario que en el resto de nuestro ámbito cultural. ¿Cómo se explica esta tendencia anómala de las mujeres cubanas, especialmente entre las mujeres jóvenes de entre 15 y 24 años?

-Las mujeres en la Isla parecen ser más proclives al suicidio, quizás porque las múltiples responsabilidades familiares y sociales que tienen que enfrentar, unidas a la incógnita de cuándo se producirá un cambio en las condiciones de vida cotidiana, comprimen la esperanza de futuro hasta suprimirla, y entonces la balanza emocional se desequilibra y la idea suicida aparece. Es importante destacar que, por muchos problemas que pueda tener una mujer o un hombre, si encuentra un sentido y esperanza de vida, el suicidio no será solución.

-El uso del fuego como método suicida se relaciona con la intención de purificación y liberación interna de los sentimientos que atormentan al suicida y lo llevan a terminar con su vida. Recordemos que la acción suicida es una manifestación de extrema agresividad que conlleva sentimientos de frustración y represión, culpa y ansiedad. El suicida es alguien que está sufriendo intensamente y no ve posible alivio a tal sufrimiento. Definitivamente, la conducta suicida se relaciona con el control de los impulsos. ¿Conoces a algún joven que no sea impulsivo?

Por el contrario que en otras sociedades poliétnicas, donde el índice de suicidio de unos grupos étnicos es muy superior al de otros, en Cuba son igualmente altas las tasas de descendientes de españoles, de africanos o de chinos y todas sus mezclas.

-Cuba es, afortunadamente, un crisol cultural, para bien y para mal. Ser “cubano” es resultado de muchas mezclas, aunque a algunos les cueste reconocerlo. Todos y cada grupo étnico tiene algo del otro y la mezcla de etnias da como resultado un grupo humano enriquecido que lo hace diferente. Sin embargo, en los resultados de las investigaciones en la Isla, ser descendiente de españoles se presentaba como uno de los factores de riesgo. Habría que estudiar la evolución del proceso histórico de mestizaje de la población en Cuba, en particular, durante el siglo XX.

Aunque las tasas de suicidio siempre han sido más altas en La Habana, con índices superiores a 30/100.000, es notable la homogeneidad en los niveles de suicidio en toda la Isla, algo contrario a lo que sucede en otros países, donde la diferenciación entre regiones es muy acusada.

-Sin lugar a dudas, las estadísticas de salud cubana son serias, pero la lectura final depende de la manera en la que se hayan agrupado los datos primarios. Para establecer tendencias comparables en el tiempo, es necesario que los datos hayan sido agrupados de la misma manera a través de los años. Si no, los datos solo se pueden analizar de manera aislada.

-En 1993, los datos del Anuario Estadístico del Ministerio de Salud de Cuba presentaban diferencias en las tasas dependiendo de si la zona de residencia del suicida era urbana o rural. En aquel estudio se halló la mayor tasa de suicidio en la zona rural, especialmente en las zonas rurales montañosas. Imagino que este dato no fue del agrado de las autoridades cubanas por el significado político de tal hallazgo. Para responder con mayor propiedad a esta pregunta, habría que revisar los Anuarios del MINSAP posteriores a 1993 y verificar si los datos primarios siguieron el mismo criterio de agrupación.

Entre 1900 y 1909, Cuba fue el undécimo país del mundo en índice de suicidio, ascendió al sexto puesto entre 1920 y 1929, manteniéndose al mismo nivel hasta los años 50, cuando desciende hasta alcanzar en 1963 su valor más bajo. En los 70 vuelven a subir para alcanzar en 1982 el récord de 23,2/100.000 habitantes, solo superado por Hungría y Austria. Y se mantiene dieciséis años seguidos por encima de los 20. ¿Cómo se explican estos datos? ¿Qué influencia ha tenido durante este último medio siglo en las tasas de suicidio el cambio en las coordenadas sociopolíticas de la sociedad unidos a una serie de eventos sin precedentes o crecientes: guerras internacionalistas, incorporación masiva de la mujer al trabajo, lo que no las ha librado del quehacer doméstico, reformulación de los roles tradicionales de género, separación de los adolescentes de su familia en las escuelas a y en el campo, elevación del machismo y la homofobia a políticas de Estado, éxodo real y frustrado, con carácter de expectativa, represión ideológica, precariedad de la vivienda y promiscuidad habitacional, reformulación de los patrones morales, descomposición de la familia (Cuba tiene la tercera tasa de divorcios a nivel mundial), alcoholismo, etc.?

-Yo no podría haber hecho mejor inventario de los eventos que han impactado dramáticamente la vida nacional cubana durante los últimos 52 años. Todo ese despropósito nacional ha socavado la esperanza de futuro de los cubanos. El nacimiento de un ser humano, por lo general se identifica con la alegría de la esperanza de futuro, no en la Isla. Afirmación establecida cuando se observa la contracción de la tasa de natalidad y, consecuentemente, la disminución de la tasa de crecimiento de la población.

-En Cuba se ha producido un minucioso proceso de involución social y económica que ha sacado a flote lo peor del carácter nacional. La revolución cubana tiene el triste record Guinness de haber sido la única revolución que se haya hecho para vivir peor. La situación de la vivienda, por solo citar un hecho, desde fines de los años 70, no es un problema, es una verdadera catástrofe sin solución. El espacio habitacional ha crecido hacia dentro; las viviendas se han tenido que dividir y vuelto a dividir de una manera surrealista, borrando los límites generacionales que permiten el desarrollo sano de los individuos y de la convivencia familiar. Refranes tan viejos como “el que se casa, casa quiere” o “cada uno en su casa y Dios en la de todos” o “calabaza, calabaza, cada uno a su casa y el que no tenga casa que se vaya a la plaza”, son historia antigua en Cuba.

Según la tesis de Durkheim, “en las naciones que tienen grandes crisis, las tasas de suicidio bajan porque la sociedad se cohesiona con mayor fuerza y los individuos participan más activamente en la vida social. Pero, si esa meta pierde sentido (…) porque se empieza a percibir racionalmente inalcanzable (…) crece la tasa de suicidios”. ¿Es posible rastrear el cumplimiento de esa tesis en la evolución de este último medio siglo?

-Aunque no tengo datos suficientes que me permitan afirmar o negar la vigencia de la tesis de Durkheim, las altas tasas de suicidio en los países del antiguo bloque socialista europeo, y de la misma Cuba, podrían estar indicando que sí pudiera existir relación entre la propuesta social de metas humanamente alcanzables y las tasas de suicidio. Sería un asunto para estudiar.

¿Cómo se relacionan los índices de suicidio con las fluctuaciones en el grado de violencia social?

-Pensando en la situación de violencia social extrema que se está viviendo en México y en algunos países centroamericanos y las tasas de suicidio que se reportan, al parecer no ha habido aumento en dichas tasas, aunque la violencia aumenta cada día.

En 1984 participaste en un equipo multidisciplinario para analizar el suicidio en Cuba. ¿Cuáles fueron sus conclusiones? ¿Qué opinas de la decisión del Gobierno cubano de clasificar al suicidio como “enfermedad crónica no transmisible”?

-En aquel estudio se hallaron algunos factores de riesgo específicos de los suicidas cubanos en la Isla. Las mujeres se suicidan tanto como los hombres. En general, las personas sin pareja (divorciados, viudos o separados) tienden más al suicidio; en Cuba, el estar casado no es impedimento para suicidarse. El suicidio se presentó entre los hombres a partir de los 35 años y entre las mujeres menores de 34 años.

-El deterioro de la salud debido a la presencia de enfermedades relacionadas con el envejecimiento entre los mayores de 60 y la ausencia de problemas de salud entre los jóvenes. Los retirados, las amas de casa y los jóvenes sin trabajo fueron los grupos sociales más vulnerables al suicidio. En todos los casos, rasgos de carácter impulsivo y agresivos. Tanto hombres como mujeres habían intentado suicidarse al menos una vez antes de lograr quitarse la vida.

-Tratar de ocultar hechos que se pueden decir de una manera simple, usando largas frases, es lo que ahora se define en algunos círculos como manera de expresarse “políticamente correcta”. Técnicamente el suicidio es una enfermedad no transmisible, el detalle de añadirle “crónica” en el contexto cubano, es admitir que se ha vuelto endémica, es decir, parte del cuadro de morbilidad (intento) y mortalidad (suicidio) nacional, a pesar de que la Organización Mundial para la Salud la considera prevenible.

Aunque en la mayor parte de los países son los jóvenes los que se suicidan, en Cuba se está verificando un incremento sustancial entre los mayores de 60 años. ¿Puede explicarse por el grado de precariedad vital, indefensión y pobreza al contar apenas con pensiones depreciadas para su sustento? ¿O podría incidir la caducidad de las ilusiones que les impulsaron durante decenios a trabajar por una sociedad más justa?

-No es exactamente así. Los mayores de 60 mueren por enfermedades que no son frecuentes entre los jóvenes, pero, en realidad, son los ancianos los más proclives a cometer suicidio. Los problemas de salud asociados al envejecimiento conducen a la depresión y la depresión puede llevar al suicidio. El suicidio entre los jóvenes aparece entre las primeras causas de muerte porque las otras enfermedades van apareciendo a lo largo de la vida. En la Isla encontramos que las tasas empezaron a aumentar entre los hombres a partir de los 35 años y entre las mujeres menores de 34, eso es lo preocupante.

¿Es marcadamente diferente el comportamiento del suicidio entre la comunidad cubana de Miami, o hay patrones comunes entre toda la cubanidad independientemente de su lugar de residencia?

-Lo común es que los cubanos, entre los hispanos, somos el grupo con mayor tendencia al suicidio. Pero comparando los datos de suicidio entre los cubanos en la Isla y en Miami, encontramos que las mujeres se suicidan mucho menos, la relación es de 5 hombres por 1 mujer. Los hombres son casados y las mujeres viudas. Los hombres tienen más de 50 años y las mujeres más de 60. Presentan enfermedades largas, dolorosas o invalidantes. Se mantienen trabajando o son amas de casa. Padecen depresión. Los hombres logran quitarse la vida al primer intento, las mujeres hacen múltiples intentos antes de lograr morir. Al parecer, envejecer es un factor de riesgo suicida para los cubanos residentes en Miami.

¿Cómo crees que pueda incidir en los índices de suicidios el drástico cambio que se avecina en la sociedad cubana, de una sociedad más o menos paternalista, a un capitalismo del timbiriche y el recorte drástico de las garantías sociales, pero sin una apertura a gran escala en el orden de la iniciativa privada y en las libertades?

-Sería añadir a la ya petrificada falta de esperanza de futuro, la certeza de que en Cuba las cosas solo cambian para peor; porque cuando hablamos de “cambio drástico”, ¿a qué nos estamos refiriendo? Los cubanos en la Isla esperan cambios reales que les permitan vivir su individualidad, con todo lo que esto acarrea de bueno y malo. Hasta ahora los tan cacareados cambios no parecen ser los que se necesitan. Yo diría que ni siquiera son cambios cosméticos. La retórica y los “novedosos” métodos de participación crítica, son más de lo mismo de lo que hemos estado viendo y escuchando durante los últimos 52 años.

-El cuento del gusto por vivir en una sociedad paternalista es parte de la monserga del discurso oficialista de los dizque “líderes”. Ese frase hecha del “estado paternalista” fue creada para esconder la esencia de la represión gubernamental. No la sigamos repitiendo. No olvidemos que en Cuba no hay derechos, lo más que se puede lograr son privilegios, y los privilegios dependen de la voluntad del que los “otorga”.

-Quiero creer que, a pesar de todo, el futuro nos va a sorprender positivamente. Los cubanos que se van a otras latitudes y meridianos, salen adelante, unos mejor que otros, siguen sus caminos con altas y bajas como cualquiera. No se puede olvidar que, como dice la romanza, vivir es lo menos que en este mundo podemos hacer.

Cubaencuentro, 15 de junio de 2011

Cuadro: El suicidio, pintado en 1854 por el belga Antoine Wiertz (1806-1865).

viernes, 26 de agosto de 2011

El ciruelo de Yuan Pei Fu


Por Pío E. Serrano, Madrid

El orientalismo, como tendencia literaria, llegó a Hispanoamérica de la mano del modernismo, que produjo un imaginario oriental desde una postura más esencial y de vocación universalista que la que venían desarrollando los escritores europeos.

Como expusiera E. Said, los acercamientos al “orientalismo” de Occidente (Europa) han creado una representación errónea y generalizada del Oriente, donde priman las visiones exóticas, románticas y extraordinarias. En los modernistas hispanoamericanos -Darío, Casal, Martí y J.J. Tablada, entre otros-, sin embargo, el propósito es la búsqueda de una suerte de fusión, abierta y dialógica, conducida por una voluntad de identificación.

Es en esta tendencia desde la que Regino Pedroso da a conocer tardíamente su espléndido El ciruelo de Yuan Pei Fu (1955), tan alejado de los exotismos y relumbrones del orientalismo banalizador, acertadamente rescatado ahora por la colección Palimpsesto del ayuntamiento de Carmona, en Murcia.

Significativa importancia tiene este texto por su acercamiento a una de las zonas de la identidad nacional menos investigadas por la crítica. Me refiero a la huella cultural que la presencia china dejara en la Isla. Llegados a Cuba los primeros ciudadanos chinos procedentes del puerto de Amoy en 1847, bajo el eufemismo formal de colonos, pronto se convirtieron en la segunda fuerza de trabajo después de la trata de africanos.

Dispersos a lo largo de la Isla para ocuparse de labores agrícolas, una vez que vencían sus abusivos contratos por ocho años e imposibilitados económicamente de regresar a China pasaron a fundirse lentamente con la población local. Hacia finales del siglo XIX y en las primeras décadas del XX la visibilidad social del chino en las letras cubanas.

Ramón Meza publica en 1887 su novela Carmela, en la que el comerciante chino Asma ocupa un papel importante. Pronto le siguieron cuentos de Alfonso Hernández Catá y Antonio Ortega, y Severo Sarduy en su novela De donde son los cantantes (1967). Más recientemente, Mayra Montero ha fundido con gran eficacia narrativa el mundo subterráneo de las sociedades secretas chinas con celebraciones sincréticas afrocubanas en el eje central de su novela Como un mensayero tuyo (1998) y Zoé Valdés se ha asomado al universo doméstico chino-cubano para entregarnos un personaje entrañable, el abuelo Mo Ying.

Por su parte, los matrimonios mixtos, generalmente de chino con negra o mulata fueron enriqueciendo la demografía nacional con una prole de criollos mestizos, algunos de los cuales habrían de marcar significativamente la cultura cubana a partir del imaginario heredado de sus mayores, como, entre otros, lo hicieran Wifredo Lam en la plástica y Regino Pedroso en el libro que comentamos.

Regino Pedroso publica sus primeros poemas inscritos en un refinado lirismo subjetivo para, a partir de finales de la década del 20, pasar a una vigorosa poesía social, abiertamente comunicadora y humana, cuya excelencia se aprecia en los versos de Salutación fraternal al taller mecánico (1927), quizás la expresión mejor de la vanguardia en la poesía cubana, también experimentada por la poesía afrocubana inaugurada por Nicolás Guillén en 1930 con Motivos de son.

Como señala Manuel Díaz Martínez, eficaz editor y prologuista del volumen, El ciruelo de Yuan Pei Fu es “el libro más excéntrico de la poesía cubana”. Concebido como un homenaje a los ancestros chinos del autor, el texto es también, formalmente, un regreso a sus inicios modernistas, pero esta vez alimentado por un sereno escepticismo ante el desalentador escenario político y social de la Cuba de los 50.

El libro se abre con un Prólogo del autor donde nos revela la ficción de haber recibido en herencia de su abuelo “el retrato de un anciano mandarín” y “un amarillento legajo lleno de variados caracteres y cuyo sentido sólo vine a penetrar en estos últimos años de mi vida”. Los poemas, pues, corresponden a la traducción de los textos recibidos en herencia. Nos anuncia también el Prólogo que los poemas se construyen en un diálogo entre el Maestro Yuan Pei Fu y el “pobre y flaco discípulo que día y noche lo siguiera”, adoptando una perspectiva didáctica, tan cara a los clásicos y renacentistas.

Poema tras poema, el autor nos revela el propósito de las enseñanzas del Maestro. Sin acritud y lleno de una serena sabiduría, extiende ante el discípulo, mediante bellas alegorías, el conocimiento sobre “la eterna mutabilidad de lo existente”, la naturaleza mutante de toda ambición, lo efímero de toda vanidad, la fragilidad del poder, los paradójicos vericuetos de la existencia, la irónica experiencia del vivir, la mendacidad de los poderosos, la dócil credulidad del menesteroso, la callada lealtad de la amistad y los delicados juegos a los que el amor conduce (El Pabellón de los Secretos, uno de los más hermosos poemas del género de la poesía cubana).

Y para que el lector no se despiste, Regino Pedroso nos advierte, al concluir su Prólogo, de que ha sacrificado la “primorosa delicuescencia estilística” y que la suya “se trata de una obra de prosaica experiencia de vida y no de dulce ensoñación poética. Los campos en que brotaron estas yemas de bambú parecen haber sido las tierras pantanosas donde madura el arroz, no los pardos celestes de la luna”.

Cubaencuentro, 15 de junio de 2011

jueves, 25 de agosto de 2011

Los Castro, perros que muerden la mano


Por Roberto Álvarez Quiñones, Los Angeles

Los hermanos Castro se comportan como el perro malagradecido que muerde la mano de quien le da de comer. Llaman "mafia de Miami" y "gusanos" a los emigrados que, al enviar a sus familiares en la Isla unos 1,100 millones de dólares anuales y llevar en sus bolsillos otros 250 millones más cuando van de visita, son los que mantienen a flote la economía que ellos arruinaron.

A esas cifras habría que sumar los hononarios exorbitantes que cobra el gobierno por los pasaportes cubanos y sus prórrogas, las "cartas de invitación", los permisos a los cubanos para visitar su país -que economistas y agentes de viajes calculan en 400 mil dólares en 2011-, la "tarjeta blanca" para viajar desde Cuba, los pasajes con precios astronómicos, las gabelas exigidas a las líneas aéreas y los turoperadores…

Se deben añadir también los 65 dólares mensuales que le exigen a cada residente en la Isla cuando viaja al exterior para poder regresar a la patria, el cobro en las aduanas cubanas de excesos de equipaje inexistentes, los chequeos médicos a emigrados, la renta de automóviles y taxis, más las fiestas y banquetes que organizan los emigrados en restaurantes, hoteles y piscinas de la Isla para que familiares y amigos tengan un momento de felicidad.

Todo ese dinero, que con las remesas puede alcanzar 1,500 o 1,600 millones de dólares, convierte a la emigración en la industria que genera el mayor ingreso neto "cash" en divisas para Cuba. Es, además, la única fuente de financiamiento que tiene el "cuentapropismo", pues el régimen ni tiene fondos ni quiere fomentar en serio el sector privado.

El gobierno de Raúl Castro sabe que la economía cubana ha logrado sobrevivir hasta hoy por dos razones: los subsidios de Hugo Chávez y las remesas que envía la diáspora cubana, que van al Estado vía shopping (tiendas recaudadoras de divisas), hoteles, restaurantes y clínicas para extranjeros.

Pero mientras las subvenciones venezolanas llegan a la Isla en especie, las remesas constituyen dinero en efectivo y conforman la "caja chica" del gobierno para sus gastos cotidianos y las importaciones de todo tipo que tiene que hacer dada la improductividad inaudita del sistema comunista.

Pese a todo lo anterior, el gobierno cubano es el único de Latinoamérica que no agradece las remesas llegadas desde el exterior, y ni siquiera da cifras de dichos envíos. De esta manera, expresa su soberbia ante tan estratégico aporte financiero de los emigrados cubanos.

Venezuela, que sustituyó a la Unión Soviética como el 'tío rico' que mantiene al 'sobrino bribón', obsequia a Cuba unos 6 mil millones de dólares anuales que incluyen 36,5 millones de barriles de petróleo con un valor que oscila entre 3,300 y 3,700 millones de dólares. Con ese petróleo gratuito, los Castro se dan el lujo de exportar gasolina y crudo, igual que hacían en los 80.

En aquella época, Cuba tenía en el CAME (Consejo de Ayuda Mutua Económica) una "cuota de consumo" de 13 millones de toneladas (90 millones de barriles) de petróleo, de las cuales consumía 10 millones y reexportaba el resto. Lo más escandaloso de esto, me dijo una vez en privado el entonces presidente de la Junta Central de Planificación (equivalente a un ministerio de Economía), Humberto Pérez: el petróleo no consumido ni siquiera llegaba físicamente a la Isla, sino que la URSS lo vendía a países capitalistas y enviaba las divisas a La Habana, alrededor de 500 millones de dólares, cifra superior a la que aportaba el azúcar.

En 2010, el consumo cubano de crudo fue de 54,7 millones de barriles (7,8 millones de toneladas), según el Ministerio de la Industria Básica, y la producción fue de 21,4 millones de barriles. Si se agrega a esta última cifra el crudo venezolano, la suma da 57,9 millones de barriles. Es decir, no se consumieron 3,2 millones de barriles, que fueron reexportados probablemente ya refinados, como gasolina, por valor de unos 350 millones de dólares. Si fue una cantidad mayor, alguien miente: o Chávez regala más de 100 mil barriles diarios, o la Isla consume menos petróleo de lo que dice. Es pura aritmética.

Otros ingresos provenientes de Caracas se basan en prácticas esclavistas. De acuerdo con "desertores", el gobierno chavista paga 3 mil dólares mensuales por cada médico cubano (unos 15 mil) en Venezuela, pero al galeno le dan 300 dólares y los otros 2,700 son para la cúspide castrista. Eso ocurre en el siglo XXI, y ni la ONU, ni ninguna institución internacional dicen nada al respecto. Pero ese despojo salarial, junto al de miles de técnicos, espías, militares y oficiales cubanos de inteligencia que operan en Venezuela, no va a la Isla, sino que el régimen lo descuenta de su deuda por el petróleo recibido.

El turismo es el principal generador de ingresos brutos en moneda extranjera, pero de cada 100 dólares que entran en la Isla, salen de 60 a 70 que son el componente importado del costo de operación de esa industria, para la cual hay que importar hasta frutas y vegetales frescos de República Dominicana. En 2010, según la Oficina Nacional de Estadísticas, el turismo aportó 2,221 millones de dólares Pero 1,488 millones de dólares regresaron al extranjero.

El níquel, primer producto de exportación, tampoco supera a las remesas. La producción cubana de níquel más cobalto ha venido declinando -¡qué raro!- y en 2009 fue de 70,100 toneladas. El coronel Marino Murillo, ministro de Economía, reveló que en 2010 se produjeron 6,700 toneladas por debajo del plan. Sin embargo, el problema aquí no es de producción sino de costos y precios.

Este metal no ferroso, esencial para la fabricación de acero inoxidable y otras aleaciones resistentes a la corrosión, llegó a cotizarse a 54 mil dólares la tonelada en mayo de 2007 en el Mercado de Metales de Londres. Luego el precio se desplomó debido a la recesión internacional.

El costo de producción niquelífera en Cuba es probablemente el más alto del mundo (se gasta demasiado petróleo). Por eso, cuando en abril de 2009 el precio cayó a 10 mil dólares la tonelada, José R. Machado Ventura (segundo en la jerarquía dictatorial) según Reuters, anunció que si el precio bajaba a 9 mil dólares sería incosteable producir dicho mineral, del cual Cuba tiene las mayores reservas probadas a nivel mundial, con unos 900 millones de toneladas.

Si Cuba vende 63 mil toneladas de níquel -China compra casi toda la producción cubana- a unos 22,500 dólares la tonelada (actual cotización en Londres), obtiene 1,417 millones de dólares. Restándole a esta cifra un costo de producción de 567 millones de dólares (al multiplicar 9,000 por 63,000 TM), el ingreso neto es de 850 millones de dólares.

Con respecto a la biotecnología, lo último informado por el gobierno fueron los 350 millones de dólares exportados en productos farmacéuticos en 2007. El silencio oficial subsiguiente sugiere un descenso de esa cifra. Además, el costo de producción en dicha industria es muy alto y las ganancias no han de ser muy elevadas.

En tabaco, en 2010 fueron exportados puros por 368 millones de dólares.Y si a eso le restamos el costo de producción y comercialización, el ingreso baja notablemente.

Las remesas, en cambio, no tienen costo de operación alguno para Cuba. Llegan libres de polvo y paja. En conclusión, los "gusanos" tan vilipendiados son la única mina de oro que tiene la empobrecida nación.
Por Diario de Cuba, 21 de junio de 2011

miércoles, 24 de agosto de 2011

Venezuela, colonia cubana


Por Adolfo R. Taylhardat, Caracas

En una de sus tantas visitas a la isla, el 'führer' (Hugo Chávez) dijo que los dos países son una sola nación, "somos venecubanos". En su reciente visita a Venezuela, Raúl Castro exclamó: ¡Somos la misma cosa!, y su par venezolano respondió: ¡Somos la misma patria!

Obnubilado por su embeleso hacia Fidel Castro el führer ha convertido a nuestro país en una colonia cubana sometiéndolo a una situación de vasallaje, facilitando la invasión de cubanos y poniendo en sus manos sectores estratégicamente neurálgicos del país.

Hay no menos de 60.000 cubanos en Venezuela. Son médicos, entrenadores deportivos, maestros, técnicos en informática, asesores políticos, militares, guardaespaldas, especialistas en espionaje sobre la población, etc. Supuestamente así paga Cuba los 100.000 barriles de petróleo que recibe diariamente de Venezuela para revenderlo en el mercado internacional. Entonces, ¿por qué los cubanos reciben salarios en dólares que nunca soñaron ganar en su país?

El primer anillo de protección del presidente Chávez está en manos de gorilas cubanos: los servicios de inteligencia cubanos tienen acceso directo al jefe del Estado y le proporcionan información que no comparten con sus homólogos venezolanos; cubanos manejan el proyecto de modernización de las comunicaciones de la presidencia; según la Confederación de Trabajadores de Venezuela, el sector petrolero venezolano está "completamente penetrado" por la inteligencia cubana; ingenieros y desarrolladores de software procedentes de la Universidad de Ciencias Informáticas de La Habana participan en la transformación de la antigua Oficina Nacional de Identificación y Extranjería en el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) y controlan la solicitud y el otorgamiento de pasaportes y cédulas de identidad electrónicos; la plataforma del Servicio Autónomo de Registros y Notarías (Saren) fue diseñada por cubanos y según el director del Saren es cuestión de seguridad del Estado "saber quién compra y quién vende, qué compran y qué venden, en qué monto compran y en qué monto venden los venezolanos", por eso es que hasta para comprar un helado o un pan se nos pide el número de la cédula; técnicos cubanos diseñaron el Sistema Integral de Gestión de Emergencias y Seguridad Ciudadana y el Sistema de Gestión Policial (Sigepol), los sistemas de información policiales -y la base de datos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sabin) están en manos cubanas; además de los 30 mil "médicos" de Barrio Adentro, técnicos cubanos en informática crearon el Sistema de Información de Gestión Hospitalaria y desarrollan los programas de imágenes médicas que emplean los Centros de Diagnóstico Integral; la Misión Milagro, que presta servicios oftalmológicos, también cuenta con especialistas cubanos; el general Ramiro Valdés, tercer hombre fuerte de Cuba, "asesora" en la crisis eléctrica; el Ministerio de Educación tiene asesores cubanos que participan en las misiones Robinson, Ribas y Sucre y en el diseño de los programas educativos; Cuba nos exporta entrenadores deportivos; todos los ministerios están plagados de cubanos; en las embajadas y consulados venezolanos trabajan funcionarios cubanos; ingenieros cubanos intervienen en proyectos y en la ejecución de obras de infraestructura como el sistema ferroviario nacional, el Metro de Valencia y la construcción de viviendas. También los cubanos intervienen en la reparación y construcción de embarcaciones.

A las denuncias acerca de la presencia de militares cubanos dentro de la fuerzas armadas venezolanas, incluso algunos de alto rango, el chavismo responde que esa presencia es necesaria para fortalecer la estrategia antiimperialista. (La mayoría de estos datos fueron tomados de un reportaje publicado en la sección Siete Días del periódico El Nacional, el 28 de febrero de 2010).

Esta creciente y sofocante influencia cubana es rechazada incluso por chavistas que todavía conservan algo de pundonor. Los militares dignos, leales a su juramento de lealtad con la patria, deben estar indignados viendo cómo es hollada la soberanía nacional.

Ahora nos enteramos de que especialistas de la inteligencia cubana controlan nuestros correos electrónicos. Se trata de operaciones realizadas desde las instalaciones de la DIM pero completamente controladas por cubanos. ¡Y para colmo nos quieren gobernar a control remoto desde la isla!

En agosto de 2005, en mi artículo Cubazuela denuncié el proyecto antipatriótico, anticonstitucional y antitodo lo imaginable de someter a Venezuela al vasallaje cubano. Hoy, cuando se consolida ese proyecto infame, denunciamos con más vehemencia todavía la traición a la patria que constituye ese proyecto monstruoso.

El Universal, 22 de junio de 2011

martes, 23 de agosto de 2011

La calle 23


Por León Padrón Azcuy, La Habana

Hace unos años, las autoridades pusieron en marcha el Plan 23, con el propósito de reparar las caferías y restaurantes que brindan servicios en moneda nacional en la céntrica calle 23 del Vedado, que se extiende desde el malecón al puente Almendares, y es una de las más populares de la capital. La terminación de la obra fue un regalo para los habaneros.

Hoy, la inversión del Plan 23 se ha evaporado. Los establecimientos gastronómicos, dotados en 2008 de algunas comodidades y un menú relativamente variado, muestran nuevamente una depauperación alarmante.

La meta original de satisfacer de manera permanentemente las necesidades del público que transita por 23, no se ha logrado. El plan fracasó y lo hecho se ha esfumado; ahora se requeriría mucha voluntad para volver a reanimar la calle.

Después de 50 años de comunismo, a pesar de los esfuerzos por rescatarla, y quizás como un reflejo en menor escala de la realidad de todo el país, mucho dista 23 de ser lo que otrora fue.

En estos tiempos exhibe una escuálida y penosa red de depauperados timbiriches, con lugares como la venta de café, frente la heladería Coppelia; la Casa del té, en 23 y G; la Cafetería de F; el restaurante Loipa, en 10 y 23; La pelota, en 12 y 23; la venta de perros calientes, en 16 y 23 y La cuevita, entre otros desastres. El aspecto y la atención de estos lugares deberían ser razón más que suficiente para no tomarse ni un café en ellos.

Ya no basta con otro “plan” o inversión que a la postre languidezca por la endémica falta de constancia en su mantenimiento. Quizás funcionaría algún plan que brindara a los trabajadores de los negocios algún incentivo económico, como la participación legal en las ganancias, y los haga realmente involucrarse en el cuidado del prestigio y el buen funcionamiento de los lugares.

Un poco de capitalismo, una manera de eliminar las causas del desinterés y la corrupción que han generado la nueva decadencia de los negocios en esta calle, y en todo el país.

Muchos que peinan canas recuerdan lo que era la Calle 23 hace medio siglo, algo que los jóvenes no conocieron. Casualmente, en estos días circula de mano en mano por La Habana, en memorias flash y CD’s un video de los años 50 sobre la famosa calle habanera, que ha causado sensación. Los jóvenes quedan boquiabiertos al verlo.

Aunque no ha perdido su importancia para los habaneros y sigue siendo uno de los principales puntos de encuentro de la capital, lejos está 23 de ser lo que fue en el capitalismo, por más que se esfuercen en reconstruirla con “planes” socialistas.

Cubanet, 24 de junio de 2011
Foto: HGabrielH. Tramo de 23 entre 10 y 12, Vedado.

lunes, 22 de agosto de 2011

Sombras y eclipses

SOMBRAS HAMMEL por Sabina***.

Por Tania Quintero, Lucerna

No recuerdo cuándo me enteré. Pero fue mucho tiempo después, cuando millones de habitantes del planeta una y otra vez habían visto las mismas imágenes. Aquel 20 de julio de 1969, los cubanos estábamos en "lo nuestro". En una revolución que un año antes se había convertido en aplanadora y acabado con quintas y mangos, bodegas y timbiriches. Y en el 69 se preparaba para la más grande zafra azucarera de su historia.

Unos pocos estaban al tanto del éxito de los cuatro de Liverpool, y de lo que en 1968 había ocurrido en Praga y París. De lo que sí a toda hora nos informaban era de las derrotas de los americanos en Vietnam. Y de los inquebrantables lazos de amistad con la URSS.

En 2004, ya en Suiza, por vez primera vi aquellos pasos del hombre sobre la luna, el 20 de julio de 1969.

Desde entonces, para bien o para mal, Cuba ha cambiado. Pero no todo lo que necesitaría cambiar. Esa generación que se las arregla y ve "canales de afuera" con antenas ilegales y con o sin trabas accede a internet, puede que tardíamente, como a mí me ocurrió, haya visto las imágenes de aquella hazaña.

En los ocho años que llevo viviendo fuera de la isla, es cuando mejor he podido percartarme de lo autobloqueados que siempre hemos estado los cubanos. Sobre todo cuando se trata de Estados Unidos, el enemigo principal de dos hermanos que hace cincuenta y dos años sumieron a un pueblo en un eclipse total. De sol y de luna.

Foto: Sabina, Flickr
Versión de post publicado el 23 de julio de 2009 en el blog Desde La Habana.

domingo, 21 de agosto de 2011

Vistazo final a Suiza


Por Tania Quintero

Lucerna, el cantón donde resido desde el 4 de diciembre de 2003, fue un pueblo de pescadores. Fundado en el siglo IX, sus símbolos más conocidos son dos puentes de madera: el de la Capilla, construido en 1333 y con una gran torre de agua y el de los Molinos, que atraviesa el río Reuss y fuera construído en 1408 y aún conserva la serie de pinturas titulada Baile de la Muerte, obra del lucernés Kaspar Meglinger.

También en Luzern o Lucerne destacan sitios históricos, como las Iglesias de los Franciscanos (1300) y la de los Jesuitas (1677); el Monumento al León, tallado en un acantilado de piedra en homenaje a los suizos caídos en 1792 defendiendo las Tullerías de París, durante la Revolución Francesa; la Muralla de Musegg (conjunto de nueve torres que en la antigüedad dominaban la ciudad) y el Museo Rosengart, con una valiosa colección de cuadros de Picasso y de otros pintores.

A la denominada 'Quinta República' pertenecen los suizos residentes en otras naciones. Las comunidades helvéticas mas importantes se localizan en Argentina, Chile, Uruguay, Brasil, pero la más fuerte de todas ha sido la de los Estados Unidos. Suizo-estadounidenses han sido Louis Chevrolet (1878); Meyer Guggenheim (1828-1905); Milton Hershey (1857-1945) y la actriz Renée Zellweger.

Entre los inventos suizos mundialmente conocidos se encuentran los productos de la marca Nestlé; el queso Emmental; el reloj de cuarzo; los motores diesel para barcos; los colorantes Geigy; los molinos de cilindros Bühler; las unidades atómicas de medición; los alfileres y el velcro.

En una lista mínima de suizos famosos no deben faltar Guillermo Tell, Juan Jacobo Rosseau, Henri Dunant (fundador de la Cruz Roja), Heinrich Pestalozzi, Carl J. Jung y Henri Nestlé. Los arquitectos Fontana, Maderno, Bonomini, Fossati y Trezzini (planeó la ciudad de San Petersburgo) y los ingenieros Gubenmann (en el siglo XVIII cobró fama por la construcción de puentes de madera sin pilares), Ohtmar Hermann Amman (construyó gigantes puentes colgantes de hierro en Nueva York y fue asesor en la construcción del Golden Gate Bridge de San Francisco) y Le Corbusier . Tampoco el hotelero César Ritz .

En calidad de refugiados politicos en Suiza vivieron los rusos Alexander Herzen (1812-1870), Mijaíl Bakunin (1814-1876) y Vladimir Ilich Lenin (1870-1924); los italianos Giuseppe Mazzini (1805-1872) y Giuseppe Garibaldi (1807-1882); los alemanes Richard Wagner (1813-1883) y Albert Einstein (1879-1940) y el inglés James Joyce (1882-1941), entre otros.

Foto: El Kapellbrücke o Puente de la Capilla es la marca de identidad de la ciudad de Lucerna .

sábado, 20 de agosto de 2011

El castillo que hechizó a Michael Jackson

Hotel Gutsch / Gutsch Hotel por Márcio Cabral de Moura.

Por Tania Quintero

No sé cómo Michael Jackson se enteró de la existencia de este fabuloso castillo, situado en el cantón de Lucerna, Suiza, y con una historia que nace en 1859, cuando un suizo nombrado Burkhard Pfyffer, compró un lote de tierra en lo alto de una colina llamada Gütsch.

Su intención era construir un restaurant, pero veinte años después, en 1879, otro suizo, Ignaz Businger, compró el terreno y edificó un hotel con una torre en el medio. Posteriormente, construyó un monorraíl, para poder subir y bajar con más comodidad, sobre todo en el invierno. En 1888 fue levantado un segundo piso y otra torre a la entrada del hotel.

Tras una larga renovación, en 1947, dos años después de finalizada la Segunda Guerra Mundial, reabrió las puertas. En 1954 los nuevos propietarios lo bautizaron con su nombre actual, Château Gütsch. Luego de sucesivas remodelaciones, el restaurant Petit Palais -en el castillo inferior- y diferentes áreas fueron abiertas al público en julio de 2008.

Para el 2012, los planes son convertir el Château Gütsch en hotel y boutique de lujo. Las actuales 31 habitaciones serán reducidas a 20, de generosas proporciones. En un edificio aledaño, entre habitaciones y suites se construirán 40, además de un spa y un salón de banquetes, entre otras instalaciones.

070425_Lucerne_P1010229 por gerdb456.

Hace tres años, cuando en Weggis, una de las localidades más turísticas de Lucerna, se preparaban para la llegada de Kaká, Ronaldinho, Ronaldo, Robinho, Roberto Carlos y otros integrantes de la selección nacional brasileña, que durante dos semanas previas al Mundial de Fútbol Alemania'06 se alojarían en el Park Hotel Weggis y entrenarían en el Brazil Football Camp, saltó la noticia de que Michael Jackson quería comprar el Gütsch.

El 26 de abril de 2006 escribí Brasil regala un gol a Lucerna, una nota hasta ahora inédita. Al final decía:

-Por los mismos días en que los suizos con los abrazos abiertos recibían la buena nueva de que la selección de Brasil se alojaría en Weggis, los residentes en Lucerna se enteraban de que Michael Jackson estaba interesado en adquirir el Hotel Gütsch, construido en lo alto de una colina, al oeste de la ciudad.

-La noticia no fue bien recibida por la mayoría de los lucernenses, quienes a través de internet y de la prensa local manifestaron su desacuerdo: casi nadie en Lucerna quiere que uno de sus monumentos vaya a parar a manos de una estrella en decadencia y sospechosa de pedofilia.

-Lucerna no suele ocupar titulares en los medios internacionales, pero de la noche a la mañana, se ha convertido en centro de atención debido a famosos de muy distinta naturaleza.

north view por stevem78.

De haberlo comprado y haber venido Michael Jackson a vivir al Gütsch, hubiera sido vecino mío. Para ir al hotel, hay que bajarse en la parada antes de la mía, que se llama así, Gütsch. El emblemático lugar está a tiro de piedra de la barriada donde vivo, y que en la foto superior se puede ver, en esa aglomeración de viviendas situada a la derecha, en medio de dos lomitas.

Lucerne from Ship por roger4336.

El Château Gütsch se divisa desde diversos sitios de la ciudad. La foto fue tomada desde el puente sobre el Lago de los Cuatro Cantones. A la izquierda se ve la Wasserturm del Kapellbrücke, puente de madera construido en 1333, y que junto con la torre de agua son símbolos del cantón Lucerna.
Según rumores, el Château Gütsch habría sido adquirido por el multimillonario ruso Alexander Lebedev, personaje también controvertido e igualmente hechizado por un castillo de cuentos de hadas. O de princesas Disney.


Fotos: Márcio Cabral de Moura, gerdb456, stevem78 y roger4336, Flickr.
Nota: Este trabajo apareció en el blog el 12 de marzo de 2010, pero lo quise reproducir para aquellos lectores que no lo leyeron.

viernes, 19 de agosto de 2011

El Monumento al León


Por Tania Quintero

El Löwendenkmal (alemán) o Lion Monument (inglés), es una escultura diseñada por el escultor danés Bertel Thorvaldsen, entre 1819 y 1821 ejecutada en una antigua cantera por Lucas Ahorn, albañil de Constanza, ciudad al sur de Alemania fronteriza con la Confederación Helvética por el norte. Luego de dos años de trabajo, el monumento fue inaugurado el 10 de agosto de 1821. Se encuentra al aire libre y su acceso es gratuito.

Es uno de los sitios más visitados por los más de 3 millones de turistas que anualmente pasan por Lucerna, cantón de habla alemana de la Suiza Central. Fue construido para conmemorar la muerte en 1792 de unos 700 mercenarios de la Guardia Suiza durante la Revolución Francesa, cuando defendían el asalto de los revolucionarios al Palacio de las Tullerías en París.

Está realizado al doble del tamaño natural de un león real y representa a un león caído, herido de muerte y con el dolor clavado en el rostro, sobre un escudo con la flor de lis de la Monarquía francesa y junto a él un escudo de Suiza. En la parte superior, la inscripción latina HELVETIORUM FIDEI AC VIRTUTI, (A la lealtad y la valentía de los suizos).

El escritor estadounidense Mark Twain (1835-1910) de esta escultura dijo: "Es el trozo de piedra más triste y conmovedor del mundo".

Foto: Erich Rachner, Flickr

jueves, 18 de agosto de 2011

A orillas del lago Sempach


Por Tania Quintero

Nuestra mejor amiga suiza cumplió sus 70 años en enero, en pleno invierno, por eso ella trasladó la celebración para un domingo, en pleno verano. Se celebró en un salón del Gasthof Sonne, viejo hotel-restaurante propiedad de la familia Wolfisberg, en Eich, pueblito a orillas del lago Sempach, a unos 70 kilómetros del centro de Lucerna, un lugar muy bonito, parecido a una zona "playera" (al no tener costas, Suiza no tiene mar: sólo lagos y ríos).

Como buena suiza que es y buena maestra que fue, nuestra amiga todo lo organizó minuciosamente. La mesa principal, donde ella se sentó, la dedicó a sus amigos que hablamos español. A mi me sentó a su lado, honor que nunca olvidaré. En la misma mesa también sentó a mi nieta; a una española dueña de la librería; a una vecina colombiana; a dos exalumnos suyos que hablan español y a la esposa e hijita de un año de uno de ellos.

En otra mesa, su familia, unas diez personas. En otra, sus dos ahijadas con sus esposos e hijos, unas ocho personas. En la cuarta mesa, a una docena de amistades desde hace más de treinta años, y en la quinta y última, amigos nacidos en Gran Bretaña, Estados Unidos y Australia, residentes en Lucerna. Uno de ellos, de Glasgow, fue con el traje típico escocés, con falda de cuadros. Unas 50 personas en total. Cada mesa tenía un adorno floral distinto.

Nuestra amiga presentó a todos sus convidados, en alemán, claro. Agradeció los regalos, en una mesa colocada para ese fin. En cada sitio puso tarjeticas con los nombres de los invitados, frente a un platico con pan y mantequilla. En una mesa aledaña, botellas de agua mineral, de Rivella (refresco típico suizo, a base de suero de leche) y de Coca Cola. Antes de servir el almuerzo, dos señoras, una pianista y la otra cantante, interpretaron música de Mozart.

Una sola empleada atendió todo el salón. Primero puso la ensalada con su aliño, por suerte no había espinacas, alcachofas, espárragos ni brócoli. En Suiza la ensalada la sirven como entrante. Entre la ensalada y el primer plato, otro paréntesis musical.

El plato fuerte fue Pouletbrüstli vom Grill (pechuga de pollo asada) con una salsa (Kräuterrahmsauce), con el sabor típico de la comida suiza, que no me gusta, porque no suelen sazonar con ajo, cebolla, ají y tomate, como los cubanos, si no romero, tomillo, basilicum y otras yerbas de dolor y sabor demasiado penetrante.

También sirvieron croqueticas de papa (Kartoffelkroketten), riquísimas y Gemüsebeilage (palitos de zanahoria y habichuelas hervidas envuelts o en una tirita de bacon). Antes, la empleada había servido vino blanco o tinto y para los niños Coca Cola o Rivella. Mientras uno comía, la empleada pasó por las mesas con una bandeja, ofreciendo más pollo y croqueticas o si querías Blumenkohl (coliflor) y Zucchetti, una especie de pepino que en España llaman "calabacín" y en Cuba no conocemos.

De postre, Gebrannte Crème, una variante de la natilla planchada o crema catalana, pero más suave. La sirvieron en una copa ancha, como si fuera un sundae. Le pusieron Rahm o nata y la adornaron con la mitad de una fresa, una lasquita de kiwi, un triangulito de piña con su cáscara y un barquillito redondo, como los que ponen (o ponían) en Coppelia con el helado.

Después del postre vino la actuación de una de las ahijadas de la anfitriona con su esposo y cuatro niños, la mayor al piano y los tres otros cantaron junto con los padres. Cuando terminaron, los dos o tres fumadores aprovecharon para salir a fumar (en Suiza nadie fuma en locales cerrados, sean casas, restaurantes, ómnibus, trenes, tiendas, teatros, con excepción de algunos bares y cafeterías de turcos y otros extranjeros y cuya clientela suele ser también foránea).

Luego la empleada vino con block y bolígrafo preguntando a cada persona si quería café, y de qué tipo (yo pedí expresso). Antes, nuestra amiga había ido mesa por mesa repartiendo una hoja con la letra de cuatro canciones suizas, que a modo de despedida fue cantada por todos.

A las 11.30 nos había recogido una amiga de nuestra amiga, descrita por ella como "una chica rubia, un poco mayor que yo, su carro es verde oscuro" (la "chica" tenía 75 años, pero para conducir no usa espejuelos). Para la ida nos llevó atravesando pueblitos, a una velocidad de 40-50 kilómetros. A las 4.30 regresamos de nuevo con ella, por una autopista más rápida (donde podía manejar a 70-80 km), pues a las 17.00 tenía que estar en el KKL, para un concierto de música sinfónica donde su marido tocaba. KKL son las siglas del Kultur Kongress Luzern, similar al Palacio de las Convenciones de La Habana, sólo que éste fue construido al lado del Bahnhof (terminal de trenes), y a orillas del Lago de los Cuatro Cantones, que bordea gran parte de la ciudad de Lucerna, y mucho más grande que el Sempach.

Antes de marcharnos, mi nieta y yo fuimos al baño. Antes de entrar, sentíamos unos pitos, pensamos que serían unos niños. Pero cuando abrimos cuatro señoras mayores, entre ellas una con una pamela blanca que debía tener como 100 años, era quien estaba enseñando a las otras tres a tocar un instrumento típico suizo de madera, parecido a una filarmónica.

Este tipo de celebraciones no se hacen en Suiza todos los días, sino cuando la persona cumple una edad que vale la pena celebrar. Espero asistir a los 80 de nuestra amiga. Entonces yo tendré 76 y mi nieta 24. Y si el blog todavía existe, sin falta se los contaré.

miércoles, 17 de agosto de 2011

Mavi Susel, la transexual cubana olvidada




Por Tania Quintero

En La homofobia no se elimina con leyes, de Laritza Diversent y mío, publicado en noviembre de 2010 en mi blog, se mencionan tres documentales cubanos dedicados al tema de la homosexualidad: La reina del condón, En el cuerpo equivocado y Otra Carmen. Uno de ellos, En el cuerpo equivocado, está basado en el caso de Mavi Susel, la primera cubana que se sometió a una operación de cambio de sexo en Cuba, el 22 de mayo de 1988.

¿Por qué si el verdadero símbolo de la transexualidad en Cuba es Mavi Susel, ahora se quiere 'vender' a Wendy Iriepa como la gran estrella transexual cubana?

Al margen de cuáles han sido los motivos para olvidarse de Mavel y lanzar a Wendy, lo cierto es que la resaca de esa boda incorrectamente llamada gay, entre la Iriepa y un bisexual, ha dejado la impresión de que sectores de la disidencia dentro de la isla ven con buenos ojos a Mariela Castro y su Cenesex.

Cuando al parecer detrás del show han estado cuatro gatos, que han aprovechado sus buenos 'conectos' (sobre todo en el exterior) para hacer la mayor bulla posible con el casamiento de una pareja, totalmente desconocida hasta que cayó en la maquinaria propagandística que estos cuatro gatos tienen bien montada en la capital cubana.

El paripé ha dejado otra ganancia gratuita para el régimen: la promoción de las cirugías de cambios de sexo en Cuba, una de las tantas ofertas que el régimen incluye en su 'turismo de salud'. Cirugías que a Mavi y Wendy le salieron gratis, pero los extranjeros tienen que pagar con dólares contantes y sonantes.

En un despacho reciente de IPS, la periodista Dalia Acosta escribe: "Estimadas en unos 15.000 dólares internacionalmente, las intervenciones fueron legalmente aprobadas por una resolución del Ministerio de Salud Pública en 2008, como parte de un programa de atención integral de salud a personas transexuales que, a los efectos del Cenesex, se complementa con una estrategia de integración social mucho más amplia. Desde entonces, 16 personas han sido operadas y otras 15 esperan la intervención, de un total de 35 transexuales confirmados, indicó a IPS el médico Alberto Roque, coordinador de la Comisión Nacional de Atención Integral a Transexuales de Cuba. Según este también activista gay, tres de las operadas han logrado el cambio de identidad legal y 12 están en proceso".

La homosexualidad en Cuba es más vieja que Baracoa, que acaba de cumplir 500 años. En
Los secuestrados de Mariela Castro, Armando López rememora la vida gay en La Habana antes de la llegada de los barbudos. Pero hay muchos más autores que lo han expuesto, dentro y fuera de la isla. Y estoy segura que continuará divulgándose e iremos conociendo testimonios como el de Poblador o el de Phedra de Córdoba, travesti cubana residente en Brasil desde los años 50 y que pueden leer en Historias de travestis cubanos.

Desde niña, siempre respeté y nunca me burlé de los 'pájaros' como en mi época llamaban a los homosexuales (a las mujeres les decían 'invertidas'). Orlando, el hermano de mi mejor amiguita, era 'pajarito', vivía frente a nuestra casa en El Cerro y siempre jugaba con nosotras, algo que yo veía normal. Después de 1959 se fue a Estados Unidos, donde murió de Sida.

Cuando en 2000-01 varias veces viajé a Cienfuegos, a visitar a mi primo Vladimiro Roca, quien cumpliera 5 años de prisión en Ariza, junto con una hermana y un sobrino de Vladimiro nos quedábamos en casa de Vilma, prima materna residente en la barriada cienfueguera de Caonao. Pasamos buenos ratos conversando con una pareja homosexual, que vivía en la casa de al lado, quienes nos contaron las dificultades que pasan los travestis para vestirse y maquillarse y también sobre los concursos y espectáculos gays celebrados en Cienfuegos, Santa Clara y La Habana, entre otras provincias.

Travestis y gay cubanos, es un post que en 2009 dediqué a un 'maricón de carroza' que era vecino mío en la Víbora. Ahí pueden encontrar una lista de artículos y filmes o documentales acerca de la homosexualidad en Cuba. En You Tube se localizan también numerosos videos sobre el tema.

Hace dos décadas, en 1991, tres años después de haber cambiado su sexo, Mavi Susel se casó ante notario con un hombre. A diferencia del revolú montado por Wendy, su novio y sus padrinos, Mavi lo hizo fuera de los focos, sin aguaje.

El documental En el cuerpo equivocado no es una grabación underground: es una filmación realizada con respaldo oficial. Es cierto que no ha sido trasmitido por la televisión, pero en agosto de 2010 fue estrenado en el cine Chaplin, uno de los más grandes de la capital, y posteriormente exhibido en salas del resto del país. Así que si los interesados en la temática homosexual en la isla no lo han visto, es porque no han querido.

El Frauensynode de Lucerna


Por Tania Quintero

En septiembre de 2007 tuvo lugar en Lucerna el Frauensynode (Sínodo de Mujeres), evento realizado cada cuatro años en una ciudad suiza (el de 2011 tuvo lugar el 21 de mayo en Zürich, pero no pude asistir).

El celebrado en Lucerna se llamó Heimat, eine Reise (Patria, un viaje). Participaron cerca de 700 mujeres, procedentes de diferentes cantones, nacionalidades y creencias, ateas incluidas. Comenzó con un viaje en dos barcos por el Lago de los Cuatro Cantones. Después, entre las 2 y las 6 de la tarde, se efectuaron actividades en varios sitios de la ciudad.

A cinco extranjeras, residentes legales en Lucerna, nos hicieron un documental, Heimat verlassen, Heimat finden (Patria perdida, patria encontrada),de 16 minutos de duración. Excepto María Alba, española casada con suizo, el resto de las entrevistadas éramos refugiadas políticas: Mala, de Sri Lanka; Marlene, de Ruanda; Ruth, de Eritrea, y yo, de Cuba. Realizado por Annelise Frey, de Visualizer Productions, el documental se proyectaba cada media hora en Sentitreff, centro de encuentro para suizos e inmigrantes desde hace más de cincuenta años, en la calle Baselstrasse.

María Alba, Mala, Marlene, Ruth y yo desde las 2 hasta las 5.30 de la tarde estuvimos en Sentitreff, atendiendo a las más de 400 mujeres, suizas y extranjeras, que por allí pasaron para ver el documental y después tomarse un café o un té y dulces, con nosotras. María Alba me sirvió de intérprete, pues mi alemán no fue suficiente para responder algunas preguntas.

Menos mal que los de la embajada cubana no se enteraron de mi participación, porque si no me hubieran enviado al grupito de suizas, latinas y cubanas que ellos controlan a través de la Asociación de Amistad Suiza-Cuba, y quienes se aparecen donde quiera que se enteran que voy a estar presente, para hablar o como invitada.

Lucerna, debo decir, es uno de los cantones que mejor trabajo realiza con extranjeros, independientemente de su condición: legales, en proceso de legalización o deportación, e ilegales. A diferencia de España, el caso que más conozco, en Lucerna y en Suiza hasta los sin papeles tienen un lugar digno para vivir, reciben un dinero mensual en efectivo y atención médica primaria.

Y lo más importante: si vienen con niños, mientras se decide el futuro de su familia, un proceso que a veces demora años, son matriculados en la escuela, primero para aprender alemán, el idioma de Lucerna, y después incorporados a los cursos regulares de enseñanza, en primaria o secundaria. Si finalmente su familia no es aprobada y son repatriados, los niños, además de su lengua natal, se van sabiendo alemán, francés o italiano, según el cantón que los haya acogido.

En St. Lukas Kirche, iglesia evangelista-reformista, tuvo lugar la clausura del Frauensynode de 2007. Duró 45 minutos y al terminar, en una gran carpa situada en los jardines hubo un "aperitivo": cestas de pan picado en cuadritos y licor de fruta sin alcohol.
A continuación, una comida, a escoger entre cuatro menús, preparados por exyugoslavas, africanas, asiáticas y suizas. Para beber, gratis, agua mineral y coca-cola. Hubo postre y café, pero no lo esperé. Ya eran las 8 de la noche y decidí volver temprano a casa.
Foto: Uno de los numerosos barcos que desde el embarcadero de Lucerna navegan por el Lago de los Cuatro Cantones, utilizado como un medio de transportación o para pasear visitantes locales y foráneos.

martes, 16 de agosto de 2011

La Virgen Negra de Einsiedeln


Por Tania Quintero

El domingo 1 de agosto de 2007 mi hija, mi nieta y yo estuvimos en Einsiedeln, en el cantón Schwyz, limítrofe con Lucerna, a una hora en tren y un poco más en auto. La ciudad es famosa por un gran monasterio y su iglesia, muy visitada por suizos y extranjeros. De una impresionante sobriedad por fuera, cuando uno entra, queda deslumbrado, por el predominio de los estilos barroco y rococó.

A la entrada, una  Virgen Negra , bellamente vestida y rodeada de oro. En los reclinatorios, las personas se arrodillan a rezar y pedirle. Delante, hileras de bancos, para contemplar en silencio a la singular virgen. En toda la iglesia se escucha un órgano y se respira olor a incienso.

Al ser una ciudad muy visitada por turistas, abundan los quioscos vendiendo souvenirs. También hay numerosos cafés, dulcerías y panaderías, restaurantes, tiendas...

Cuando terminó el paseo por Einsieldeln, la amiga que nos llevó en su auto decidió volver por Zug, uno de los paraísos fiscales suizos donde vive gente famosa. El cantón Zug está a medio camino entre Lucerna y Zürich. Hicimos una parada en Hohle Gasse, sitio vinculado a la historia de
Wilhelm Tell , héroe nacional suizo.

Allí, luego de recorrer un camino de piedras, se llega a una vieja y pequeña capilla. Dentro, se puede ver una pintura sobre la leyenda de Tell.

A las 10 de la mañana habíamos salido de Lucerna, con 16 grados. Cuando regresamos, a las 7 de la tarde, el termómetro marcaba 32 grados.

lunes, 15 de agosto de 2011

Las murallas de Solothurn

Solothurn por micky the pixel.

Por Tania Quintero

Cuando hace cinco años estuve en Solothurn, uno de los 26 cantones de la Confederación Helvética, lo que más me llamó la atención fueron las murallas.

07-03-04 Solothurn 0006 por clare_and_ben.

Al igual que La Habana siglos atrás, en Solothurn tuvieron que amurallar la ciudad para defenderse de invasiones foráneas.

Solothurn Bastion 2.jpg por Nat lie.

La vegetación ha contribuido a hacer más atractivas las antiguas murallas.

Solothurn por orangevolvobusdriver4u.

Las calles empedradas recuerdan las de la Habana Vieja. Sin las bicicletas, claro.

Solothurn por orangevolvobusdriver4u.

Las murallas de Solothurn, como las de La Habana, forman parte del paisaje y la arquitectura urbana.

Fotos: Flickr

domingo, 14 de agosto de 2011

Kreuzlingen, la primera impresión

Kreuzlingen - Switzerland por Kecko.

Por Tania Quintero

Cuando el tren procedente de Zürich paró en Kreuzlingen y mi hija, mi nieta y yo nos bajamos, lo primero que hicimos fue protegernos del frío y acomodar los matules en un saloncito cerrado y acristalado existente en el lugar.

Mi hija y mi nieta se quedaron con el "equipaje" (tres mochilas y tres maletines de mano), mientras yo salí a buscar el centro de acogida para solicitantes de asilo, donde debíamos presentarnos (Kreuzlingen es uno de los ocho distritos de Thurgau, cantón suizo situado a pocos kilómetros de la frontera con Alemania).

Acostumbrada en Cuba a cruzar por la línea del tren, empecé a caminar, esperando encontrar un paso a nivel para poder atravesar. Imposible. Retrocedí y fue cuando descubrí el subterráneo por donde se camina y llega a la ciudad. Eran alrededor de las cinco de la tarde del miércoles 26 de noviembre de 2003, afuera ya había oscurecido, pero en aquel túnel bien iluminado y solitario, lo primero que me llamó la atención fue ver una docena de bicicletas recostadas en la pared, sin candados ni amarres.

Una escena que de tan corriente ya no me llama la atención. Y es que en Suiza, sobre todo en las estaciones ferroviarias, la gente sale de su casa en bici, la deja en los parqueos para "velos", como los suizos les dicen, se va a buscar su tren -el principal medio de movilidad en el país- y cuando regresa de trabajar, estudiar o pasear, la recoge. En las grandes ciudades algunas son amarradas, pero la mayoría no. Incluso hay quienes las dejan con un paquete en la cesta. Es que robar una bicicleta en Suiza es algo tan insólito como toparse con un ovni en los Alpes.

Quienes prefieran llevarse en el tren su bicicleta lo pueden hacer, en el vagón destinado a las "velos". Los cochecitos de bebés, por supuesto, se acomodan en los trenes con sus padres u otros familiares, igual que los perros. Y no sólo en los trenes: en las rutas urbanas también puedes subir con cochecitos, perros y bicis, al menos en los de Lucerna, donde todos los ómnibus tienen un espacio para tan especiales "acompañantes".

Lo segundo que más me sorprendió fueron las cebras o pasos peatonales, existentes en cada esquina o a medianía de cuadra en todos los centros urbanos con mucho tráfico. Al principio me quedaba parada, esperando a que los autos y vehículos aminoraran la marcha, pero enseguida me percaté que no era necesario. Los choferes de bicicletas, motos, ómnibus y camiones, en cuanto divisan que una persona se detiene para cruzar por la cebra, se detienen. Y es que por las calles de poblados y ciudades no se puede conducir a más de 30-40 kilómetros por hora, velocidad que permite al chofer rápidamente detenerse cuando una persona va a cruzar un paso peatonal.

En vías muy transitadas, además de semáforos y cebras en la superficie, se puede atravesar por túneles que te permiten cruzar tranquila y seguramente por debajo. La foto mostrada fue hecha en Kreuzlingen y apenas necesita comentarios. En ella se aprecian tres carriles bien señalizados: dos para bicicletas y una para adultos con niños.

Uno de los varios ejemplos que se podrían mencionar acerca de la seguridad vial y de los reglamentos y leyes del tránsito que forman parte de una educación que comienza a ser trasmitida desde los primeros grados de la enseñanza primaria. Con la misma seriedad y entusiasmo que los maestros ponen para que sus alumnos, desde pequeños aprendan a nadar, montar en bicicleta, esquiar en las montañas, hacer una fogata en el bosque o cruzar sin peligro las calles.

Foto: Kecko, Flickr

sábado, 13 de agosto de 2011

¡Descansa en paz, Elizabeth!


Elisabeth Eidenbenz, la fundadora de la Maternidad de Elna, falleció a los 97 años, el 23 de mayo de 2011, en Zürich. Esta enfermera y maestra suiza salvó la vida a 597 hijos de refugiados de la Guerra Civil Española y a judíos que huían del nazismo.

Su labor fue rescatada del olvido hace una década por la alcaldía de Elna, al sur de Francia. Israel, Francia, España y Cataluña la han distinguido por su labor humanitaria. En Suiza, sin embargo, es prácticamente desconocida.

De 1939 a 1944, en plena Guerra Mundial, Elisabeth Eidenbenz (1913-2011) estableció, en un castillo abandonado, un centro de acogida para bebés y mujeres embarazadas procedentes de los campos de concentración de las playas de Argeles y otros lugares próximos en el sur de Francia.

Esta joven enfermera de apenas 24 años, originaria de Wilda (cantón Zürich), y su equipo lograron salvar de la muerte casi segura a cerca de 600 niños. En la Maternidad de Elna nacieron unos 400 bebés y se acogieron a cerca de mil internos. Eran en su mayoría republicanos españoles, apátridas, judíos, comunistas y víctimas de la guerra.

Su labor humanitaria la convirtió en heroína para muchas familias exiliadas y fue reconocida con prestigiosas distinciones en Israel, Francia, España y Cataluña, que la condecoró con la Creu de Sant Jordi en 2006.

Eidenbenz llegó a España en 1937, en plena Guerra Civil, con una delegación suiza de ayuda humanitaria. Tras la derrota republicana, medio millón de españoles huyeron de las represalias cruzando los Pirineos. Una vez en Francia, fueron conducidos a los denominados campos de concentración en el sur del país.

Eran campos sin apenas instalaciones sanitarias, construidos en plena playa, donde no había dónde refugiarse. Las personas vivían a la intemperie, hacinadas, sin comida y sin higiene. Las condiciones de salubridad eran terribles y la mortalidad infantil rondaba el 95%.

Al percatarse del grave peligro que corrían las embarazadas y los bebés, Elisabeth Eidenbenz decidió crear un centro de acogida, la denominada Maternité, en una antigua propiedad de los Bardou, una familia industrial del Rosellón. Durante cinco años, la joven directora transformó este palacete abandonado, según sus palabras, en un “oasis de vida en un océano de destrucción”.

Con la ocupación nazi y el establecimiento del Régimen de Vichy empezaron a llegar refugiados políticos. Eidenbenz, decidida a no cumplir la política de neutralidad impuesta por la Cruz Roja Suiza, desobedeció las directrices de la organización humanitaria y permitió la admisión de judíos, gitanos y otros perseguidos por los nazis.

Las madres daban nombres falsos para encubrir el origen judío de los niños, poniéndoles a menudo nombres españoles para no levantar la sospecha de los gendarmes franceses o de los oficiales de la Gestapo alemana.

Cuando los gendarmes se acercaban al centro para controlar la identidad de los refugiados, Elisabeth Eidenbenz exclamaba: “¡Esto es territorio suizo!” Defendió como pudo a las madres y a los niños acogidos, hasta que en 1944 el centro fue desalojado definitivamente por la Gestapo.

Durante décadas esta acción humanitaria permaneció en el olvido. En 2005, cuando la Alcaldía de Elna compró el inmueble para crear un lugar de conmemoración, recuperó actualidad y salieron a la luz documentales, monografías y novelas. Entre ellos, la película Las madres de Elna (2009), del director Manuel Huerga, basada en una obra de la autora catalana Assumpta Montellà.

También la televisión suiza dedicó en 2005 a esta madre coraje una producción titulada Ein Herz für Kinder: Schweizer Retterin im 2. Weltkrieg (Compasión por los niños: una salvadora suiza en la Segunda Guerra Mundial), dirigida por Annemarie Friedli.

La periodista desconocía por completo la historia de esta mujer hasta que en 2004, durante sus vacaciones en Collioure, cerca de Elna, una vecina judía se la contó. Tras su regreso a Zürich, decidió rendirle homenaje con un reportaje.

Friedli destaca la humildad que caracterizaba a Elisabeth Eidenbenz y su gratitud al ver que el tema empezaba a interesar en Suiza. “Sentía una gran satisfacción por haber podido vivir todas esas experiencias”, explica.

Y recuerda que la nonagenaria Elisabeth le contó su historia en un tono algo áspero, a pesar de la emotividad que despertaban en ella los recuerdos. Hablaba perfectamente español y se sintió colmada de felicidad al reencontrarse con “sus niños” (como ella los llamaba), con ocasión de la entrega de la medalla de la Legión de Honor en Viena en 2007.

Annemarie Friedli rememora sus encuentros con Eidenbenz con mucho cariño y se declara fascinada por la fuerza de voluntad de la “Señorita Isabel”, que siendo muy joven, se arriesgó a emprender una aventura humanitaria de tal envergadura. Sin embargo, “restaba importancia a su papel y decía que solo había hecho lo que debía”.

En enero de 2011 la periodista apadrinó una exposición dedicada a la enfermera en el Alterszentrum Kluspark de Zürich que, según lamenta Friedli, no encontró ningún eco en la prensa helvética.

De la misma manera que Friedli deplora que la muerte de Eidenbenz haya pasado inadvertida para los medios suizos: “Me parece increíble que no se haya publicado ninguna nota necrológica; ni siquiera en el Neue Zürcher Zeitung”.

Y atribuye este hecho al exagerado pudor del cual los suizos hacen gala a la hora de rememorar figuras y episodios históricos del pasado reciente, incluso cuando, como en este caso, se trata de un gran ejemplo, un suceso alentador y positivo.

En su opinión, este desinterés se debe al tedio general que provocaron los intensos debates en los años 90 sobre el papel que desempeñó Suiza durante la Segunda Guerra Mundial.

“Lamentablemente, esta señora es solamente uno de los muchos personajes de la historia reciente de Suiza que la sociedad ha ignorado o que simplemente han caído en el olvido”, concluye.
Swissinfo, 27 de mayo de 2011

Foto: Portada del libro que la escritora catalana Assumpta Montellà dedicó a Elisabeth Eidenbenz.

viernes, 12 de agosto de 2011

Suiza, el país donde vivo (XII)


La gastronomía de Suiza es multifacética. Mientras algunos platos como el fondue, la raclette o el rösti están presentes en todas las cocinas del país, cada región ha desarrollado su propia gastronomía, coincidiendo cada zona gastronómica con las distintas zonas lingüísticas. La cocina tradicional suiza usa ingredientes parecidos a los de otros países europeos, entre otros productos lácteos y quesos como el gruyer o el emmental, producidos en valles de Gruyère y de Emmental, de donde toman sus nombres.

El chocolate se ha fabricado en Suiza desde el siglo XVIII, pero ganó su reputación a finales del siglo XIX con la invención de técnicas más modernas, como el conchado y el templado, que ayudaron a mejorar la calidad de los productos. Además, otro de los grandes adelantos suizos en esta industria fue la invención del chocolate con leche en 1875 por Daniel Peter.

El vino, principalmente blanco, se produce sobre todo en Valais, Vaud, Ginebra y Ticino. Los viñedos han existido en la zona desde la época de los romanos, e incluso se hallaron vestigios de fechas anteriores. Las variedades más producidas son el Chasselas (llamado "Fendant" en Valais) y el Pinot Noir. El Merlot es la principal variedad producida en la Suiza italiana.

Gran parte de los deportes más populares en Suiza son los de invierno. El esquí y el montañismo son muy practicados en el país tanto por suizos como por extranjeros, cuyas cumbres nevadas atraen a alpinistas de todo el mundo.El país ha organizado múltiples campeonatos y torneos mundiales de deportes invernales, incluyendo dos ediciones de los Juegos Olímpicos de Invierno, en 1928 y 1948, ambos en Saint Moritz. Además, en Engelberg, anualmente se celebra una de las pruebas de la Copa del Mundo de saltos de esquí.

Como otros europeos, muchos suizos son aficionados al fútbol y el país cuenta con su propia selección nacional. Desde la década de 1920, el fútbol cobró popularidad y comenzó una época de auge en el país, que culminó en 1954, cuando Suiza organizó un Campeonato Mundial de Fútbol. Tras un estancamiento en las décadas que le siguieron, a finales de la década de 1990, la selección de fútbol logró clasificarse para la Copa Mundial de 1994, y la gente retomó el interés por el fútbol.Hasta 2009, la selección nacional ha disputado 8 Copas del Mundo, siendo los cuartos de final su mejor resultado. En 2008, junto a Austria, Suiza organizó la Eurocopa. Suiza ha participado en 3 Eurocopas, donde nunca ha pasado de la primera fase. La principal competición de fútbol del país es la Super Liga Suiza.

Muchos suizos también son seguidores del hockey sobre hielo y apoyan a uno de los 12 clubes en la Liga A de ese deporte. En abril de 2009 Suiza fue la sede del Campeonato Mundial de hockey sobre hielo por décima ocasión.

El ciclismo es otro deporte que también cuenta con una amplia promoción y participación. En Suiza, se celebran gran variedad de pruebas ciclistas como la Vuelta a Suiza y el Tour de Romandía, y el país ha sido sede de campeonatos internacionales como el Campeonato Mundial de Ciclismo de Ruta. Entre los ciclistas suizos más destacados se encuentran Fabian Cancellara, Alex Zülle y Tony Rominger.

Otros deportes que han cobrado popularidad en Suiza incluyen el tenis, con tenistas de la talla de Roger Federer y Martina Hingis, y el patinaje artístico, donde se ha destacado Stéphane Lambiel. En estos dos deportes los suizos han ganado múltiples torneos y campeonatos. Existen otros deportes donde varios deportistas suizos han sido exitosos como esgrima (Marcel Fischer); piragüismo (Ronnie Dürrenmatt); vela (Alinghi); kayakismo (Mathias Röthenmund); voleibol (Sascha Hayer, Markus Egger, Paul y Martin Laciga), entre otros.

El automovilismo, el motocilismo y otros deportes similares fueron prohibidos en Suiza después del desastre de Le Mans en 1955, exceptuando eventos como la carrera de montaña. Esta prohibición fue retirada en junio de 2007. Durante este período, surgieron corredores exitosos como Clay Regazzoni, Jo Siffert y Alain Menu. Suiza ganó la Copa Mundial de Motocross A1GP en la temporada 2007-2008, con el conductor Neel Jani. El motociclista suizo Thomas Lüthi en 2005 ganó el Campeonato Mundial de Moto GP en la categoría de 125cc.

Los deportes tradicionales suizos incluyen la lucha llamada Schwingen, una antigua tradición de los cantones rurales del centro del país.El Steinstossen es la variante suiza del lanzamiento de peso, una competición donde se arroja lo más lejos posible una pesada piedra. Practicado entre la población alpina desde la época prehistórica, se popularizó en Basilea alrededor del siglo XIII. El Ornussen es otro deporte autóctono de Suiza, es una mezcla de béisbol y golf y se practica en la zona norte del país. (Fin)

Foto: Fondue, plato típico de la cocina suiza.


Nota.- Las 12 partes de este serial fueron tomados de Wikipedia.