Hace unos días, un amigo residente en La Habana me hizo llegar una extensa carta, para que se la pusiera al correo a su hermano en Estados Unidos. La carta fue escrita a lo largo de varios días, entre finales de diciembre de 2010 y la primera semana de enero de 2011. Como me pareció una ventana a la realidad de la Cuba actual, le pedí permiso a mi amigo para publicarla en el blog, quitándole los nombres. Ésta es la segunda parte. Marco A. Pérez López (malopezmx).
Esto aquí está que no se calcula. Hace unos días mi hijo me dijo que la computadora de la novia tenía roto el mouse y que si por el trabajo habría alguno. Yo conseguí uno de luz para la casa pero cuando fui a averiguar con los socios me dijeron que no había ninguno. Él también me dijo que buscara en revolico.com, que ahí se anuncia gente que vende cosas y eso, ustedes saben.
Cuando voy a ver al socio y le pregunto en voz alta, me hace señas de que baje la voz porque el jefe está en el local de al lado, dividido por una pared de aluminio y planchas plásticas y se oye todo. Resulta que el sitio no es de aquí, inocente de mí, sino que está en un servidor afuera y que aquí lo han querido bloquear varias veces. ¡Mira que comen mierda e hijeputean esta gente! Para que nadie pueda vender nada, ni comunicarse ni nada.
Hace como seis meses que una colega de mi trabajo que vive en Mantilla no tiene agua. Simplemente un día dejó de entrar como antes, que era todos los días a toda hora, y fue reduciéndose el horario hasta que ya no entró más. En su casa no hay cisterna porque allí, cuando se construyó la casa en los 50, jamás faltaba el agua. Ahora la mujer está que se hala los pelos. Por suerte, solo tiene un hijo de veinte y tantos años que vive en casa de una novia.
Hace poco, comentando con otro del trabajo la situación de ella, me dice que en su barrio, Víbora Park, faltó el agua de buenas a primeras y la gente empezó la cargadera de agua con toda la incomodidad y el encabronamiento que eso trae. Y resultó que descubrieron que el tipo del acueducto, encargado de abrir y cerrar las válvulas de la zona, las había cerrado para que unos “paladares” (restaurantes privados) que había por allí, gente con plata, tuvieran que pagar pipas que les llevaran agua y él cogía parte del dinero que le pagaban a los piperos. ¡Hasta donde ha llegado la falta de escrúpulos, el abuso, la inmoralidad! A ese tipo no le importaba que hubiera gente con niños o con viejos postrados o simplemente personas que debían andar corriendo detrás del agua por culpa de ese sinvergüenza.
Se ha perdido todo. Como dice el hijo de una amiga mía, el cubano de hoy sólo sabe robar todo lo que puede. O tratar de irse. No tiene concepto de derechos, libertad, respeto a sí mismo.
El vecino de los bajos, dice que el otro día pasó por una esquina donde habían dos prietos y uno le decía al otro: ”Lo que estoy es loco porque se forme, para meterle una pedrá a cualquier vidriera y cargar con todo lo que vea ahí”.
Ayer hubo una reunión para discutir los Lineamientos y uno se paró y dijo que después de 50 años de mentiras (así con esas palabras) el no creía en nada de lo que decía ese documento. Otro dijo que si en todo este tiempo no se había hecho nada, él pensaba que era una pérdida de tiempo reunirse para discutir, pues ya todo estaba acordado.
Por donde vive un amigo, una mujer sacó licencia para alquilar y ya tuvo que cerrar, porque la licencia tenía que pagarla con lo que el hijo le mandaba de Miami. Y eso que dice el Granma que el 68% de los que han sacado licencia ahora, no tenían vínculo laboral anteriormente, o sea, no son los que ya han botado del trabajo.
Ahora mismo me acaban de decir que van a cerrar un comedor que hay cerca del trabajo, que vendía comida a los jubilados de escasos recursos y que remozaron para vender comida a los trabajadores de los alrededores dentro del plan de eliminar los comedores obreros. Daban un misérrimo bocadito de jamón y queso con una lata de refresco y empezaron a darle a la gente el valor de ese “almuerzo” en CUC, unos 13 o 25, en dependencia de los días que hayas trabajado.
Con ese dinero la gente iba y pagaba su almuercito que, como todo aquí en Cuba, empezó más o menos bien y ha terminado en poquito y malo (y vale igual: cinco pesos). Hoy, a uno que va a buscar el almuerzo para comérselo en la oficina, le dijeron que eso lo van a eliminar, también lo que le daban a los viejitos. A joderse los viejos… y los que no lo son también!
Ayer por la noche, el hermano de ése que fue a buscar el almuerzo y le dieron la mala noticia, estaba cerrando la cafetería donde trabaja por la Habana Vieja. Había otro más con él y en eso el otro le dice si no había visto tres tipos que entraron corriendo hacia el fondo del local y, diciendo eso, el tipo va detrás de los que entraron. Cuando llegó al fondo vio a los tipos agazapados detrás de unas cajas y salieron a atacarlo. El hermano de mi amigo, a los gritos, se sumó a la bronca, salieron vecinos y al final apareció la policía y se los llevó. Al parecer, los tipos esperaban que cerraran la cafetería para robarse todo lo que pudieran.
Hoy mismo, cuando venía para el trabajo, me llego a un “huerto urbano” a comprar un poco de lechuga y acelga y se acerca una mujer y empieza a quejarse de que había comprado unos tomaticos, unos pepinos y unos ajíes en los particulares y se había gastado 16 pesos. “Dentro de poco no se va a poder comprar nada en la calle”, me dice. “Bueno, pero entonces no sé qué va a comer”, le respondo. Así siguió quejándose hasta que me fui. Todo el mundo habla de lo mismo y coincide que esto no tiene remedio.
Mi exmujer me contó que hubo un 'explote' (desfalco) en Gastronomía de la Habana Vieja, Centro Habana, Arroyo Naranjo y otros municipios. Millones de pesos en faltantes. En Centro Habana fueron como 30 millones que, aunque sean pesos cubanos devaluados, son 30 millones como quiera que sea. Después me enteré que se echaron (botaron) al secretario del partido y pusieron a una mujer. Y la flamante nueva secretaria, con el segundo secretario y el presidente del Poder Popular, metieron un fiestón al que invitaron a uno del partido provincial. Ahora están investigando de donde sacó el dinero para esa bachata.
Es una corrupción que no tiene comparación con nada de lo que se había visto en este país en 52 años de "revolución".
Me enteré ayer que no se van a cerrar los comedores de barrio, es que el 'explote' ha sido tan grande que todos los que tienen que ver con la distribución en Ciudad Habana están presos y la Fiscalía ha mandado a parar los suministros a las unidades hasta que hagan un inventario de todo lo que se han robado. Imagínense que hay gente que compró casas e hizo piscinas, por no hablar de equipos, aires acondicionados, etc, en esas casas.
Ayer un socio del barrio estuvo en la casa, con un video del programa de María Elvira, de Miami, sobre las empresas de 'papá' (Raúl Castro). Sin comentarios, porque es llover sobre lo mojado. Mi madre le estaba haciendo el cuento de lo que le dijo el médico, que sin examinarla le dijo que lo de sus dolores era falta de vitaminas, que tomara Polivit, y cuando ella le enseñó las que tú le habías mandado dijo que sí, que tomara esas mismas, una diaria como indicaba el frasco.
El socio dijo que lo mejor era no caer en el médico a menos que uno tuviera un amigo y yo le contaba la anécdota de un conocido, que la mujer se partió un brazo en Varadero y el padre de él, que tenía sus conexiones, llamó al hospital Frank País para que la nuera se tratara allá. También, por supuesto, había carro para llevarla y traerla. Le hicieron las pruebas a la mujer y como llevaba varias horas sin ponerse nada, había que operarla, para poner el hueso en su lugar. El que la iba a operar, que era del equipo de Álvarez Cambra, se complicó y cuando la mujer estaba ya media dormida entró una doctora preguntando “Bueno ¿donde está la pierna que hay que operar?”.
La mujer, medio dormida y casi sin poder hablar sacó el brazo de debajo de la sábana y se lo enseñó. La cirujana se quedó medio turbada pero se recuperó “Sí, sí, yo estaba jugando ¿ese es tu brazo? Ni te ocupes que te lo dejamos nuevo”. Si la mujer no anda clara, le abren la pierna por gusto. Y eso le pasó a personas que tenían amistades y buenos contactos en ese hospital.
Le conté también el caso de la esposa del albañil que puso los azulejos de la meseta de la cocina, que la ingresaron en la Covadonga para una operación sencilla y la pusieron en una cama donde había estado otra paciente, pero le dejaron la hoja del tratamiento que seguía la otra. Al día siguiente, llegó una enfermera, le puso una inyección a la tipa y la mató porque era alérgica a ese medicamento. Y no pasó nada.
Buenísimo relato! Hace falta que mucha más gente en Cuba cuente a sus familiares afuera todas las cosas que allá ocurren y éstos lo divulguen, porque es una fuente de información tan buena o mejor que la de los periodistas independientes y los blogueros, salvo excepciones.
ResponderEliminarCiertamente cuentos como este es lo que verdaderamente nos da una idea bien completa de lo que alla sucede en el dia a dia. Creo que los periodistas independientes y los blogeros de Cuba debieran exponer mas frecuentemente los diferentes casos que se suceden a diario alla, en vez de escribir conclusiones u opiniones del caos diario.Ese desenfreno de descomposicion material, morl y social es lo que va ha dar al traste con ese infierno.
ResponderEliminarCandela!! El patio está encendío...
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