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lunes, 27 de marzo de 2023

Mi amigo Eberhard Gärtner (IV y final)

El martes 8 de enero de 2013, a Eberhard y Hannelore les envié un correo con la receta de frijoles negros que me pidieron (ver post anterior).

Queridos Eberhard y Hannelore, gracias por la foto del 31 de diciembre. Me alegro que vuestra salud haya sido buena en 2012 y espero lo siga siendo en 2013. A continuación, cómo preparar frijoles negros al estilo cubano. Hay varias recetas, pero esta es la que yo hago. En Lucerna compro un paquete de frijoles negros de 500 mg, de Brasil o Portugal, que son pequeños, como los nuestros.

Frijoles negros a la cubana

- Un paquete de 500 mg de frijoles negros.
- 2 hojas grandes de laurel.
- La mitad de un ají o pimiento (peperoni) verde grande.
- Una cebolla, mediana o grande.
- 4 dientes de ajo.
- Media cucharadita de comino molido.
- Media cucharadita de orégano en hoja o molido.
- Una cucharadita de azúcar.
- Una cucharadita de vinagre.
- Sal y pimienta al gusto.
- Aceite, de oliva o de girasol.

Los frijoles se vierten sobre un paño blanco en la mesa y se escogen o limpian, quitando los dañados y cuidando que no haya piedrecitas. Se enjuagan bien bajo la pila de agua y se vierten en una cazuela grande con suficiente agua, se le añaden las dos hojas de laurel y se ponen a la candela, primero a fuego alto y cuando comienza a hervir se pone a fuego mediano. Hay que estar al tanto para que no se gaste el agua, si después de una hora no se han ablandado, se le echa más agua, del tiempo.

Cuando están blandos los granos de frijoles, se dejan en la candela muy bajita y en otra hornilla se prepara el sofrito. Previamente, se ha cortado bien el ají, la cebolla y los ajos. En una sartén con suficiente aceite, se echa primero el ají y la cebolla y cuando se han frito un poco, pero sin llegar a quemarse, se añade el ajo, el comino, el orégano y pimienta, si ésta gusta. Luego de dos o tres minutos, con un cucharón se saca un poco de caldo y frijoles y se vierte sobre el sofrito, se añade la sal (aproximadamente una cucharada) y la cucharadita de azúcar. Cuando empieza a hervir, se vierte todo sobre el resto de los frijoles, se sube la candela y se prueba si está bien de sal, si no, se le echa más sal. Después, al final, una o dos cucharaditas de vinagre.

A quienes gusta el picante además del ají o pimiento verde, pueden echarle al sofrito algún tipo de ají picante. O echárselo a la hora de comerlo. En Cuba, el potaje de frijoles negros se come con arroz blanco, pero también se pueden comer solos, con pan. La diferencia con el potaje de frijoles colorados y los blancos o judías, es que a éstos se les añade puré de tomate, el ají puede ser rojo y se ponen a ablandar con un pedazo de tocino y un chorizo. En el caso de los frijoles colorados, en Cuba le echan calabaza y papas a los frijoles blancos o judías.

Una semana después, Eberhard me respondió y envió cuatro fotos de su casa en Dresden que hizo en el verano de 2012 y de las cuales he puesto dos en este post: la parte posterior, donde se encuentra una pequeña terraza, y una vista del hermoso jardín.

Querida Tania,

Todavia no he preparado la receta de frijoles negros que me enviaste, pero pronto la haré. Lo que me admira es que no tenga carne ni caldo. Me parece recordar que en Cuba tomé una sopa tradicional con unos trocitos de carne de cerdo (debe haber sido un ajiaco). Pero francamente, después de casi medio siglo ya no estoy muy seguro. Sólo me queda el vago recuerdo de que aquella sopa me gustaba.

El próximo fin de semana nos visitan dos parejas de amigos para comer la famosa "feijoada brasileira". Es con carne, y nosotros le añadimos verduras (col, zanahorias, pimientos), segúna una receta del sur del Brasil. Pero no le ponemos el hocico del cerdo, ni el rabo, ni las orejas, como hacen los brasilenos (el plato surgió como comida de los esclavos, que no disponían de otras carnes).

En Brasil la preparan con siete tipos de carnes: carne seca (tasajo), carne cruda de cerdo y vaca, chorizo y las partes del cerdo antes mencionadas. Hannelore y yo hacemos la "feijoada" con costillas de cerdo saladas y ahumadas, tocino ahumado y chorizo con ajo. Nos queda riquísimo, la acompañamos con arroz blanco, hollejos de naranja con azúcar y, por supuesto "cachaça" (aguardiente de caña), que se toma con limón y si a alguien no le gusta, puede tomar cerveza o vino blanco. Es un plato que solo comemos en invierno, aunque los brasileños lo comen también en los meses de calor, generalmente los sábados, cuando se puede dormir la siesta después de almorzar.

Por lo demás estamos bien. Mi asma no me hace sufrir mucho, ni el reumatismo tampoco. En esta época salgo poco, solo al huerto para ir buscar leña para la chimenea, o papas y manzanas que tengo guardados en el sótano de un bungalow que tengo allí, pues nuestra casa no tiene sótano, por la proximidad del río. Desde el invierno alemán (hoy ha vuelto a nevar), Hannelore y yo te mandamos un fuerte abrazo.

Descansa en paz, querido Eberhard, ojalá te hayan enterrado en el mismo cementerio donde reposan tus padres!

Tania Quintero

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