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lunes, 4 de mayo de 2020

Música en tiempos de coronavirus. Orquesta Sublime: La Asiática


Pareciera una premonición para los tiempos actuales, pero fue una guaracha de éxito hace 60 años en Cuba: la Orquesta Sublime se inspiró en una pandemia que azotó al mundo para sacarle partido musical entre los bailadores y sazonar con humor los difíciles momentos de una hecatombe como la del coronavirus.

La Asiática, un número grabado por la agrupación a comienzos de 1959, tomó como referencia al brote de una gripe causada por un virus de la influenza A (H2N2), y que entre 1957 y 1958 causó más de un millón de muertes a nivel global, según estimados de la Organización Mundial de Salud. El virus se detectó por primera vez en la provincia de Yunán, en el sureste de China, en febrero de 1957, y se expandió rápidamente hacia Singapur y Hong Kong y Japón. Para mediados de ese año ya hacía estragos en el continente americano.

Ante las consecuencias derivadas del flagelo mundial, la música cubana optó por despedirse de los peores momentos de la crisis con buena cara y ánimos de festividad: “Las cosas que están pasando no son de casualidad/ La gripe que está acabando con toda la humanidad/ La Asiática le dicen a la gripe, la Asiática le dicen/ y yo que soy precavido, pues dejo de trabajar,/ porque si me coge el gripe/ cómo me voy a arreglar”, dice la letra de la canción, compuesta por Fernández Valencia y Obdulio Morales. Remata con un pegajoso estribillo: "La Asiática me tiene/ hablando en chino".

El tema popularizado por la Orquesta Sublime viene como anillo al dedo para contextualizar la polémica desatada por NG La Banda y su director, José Luis Cortés, El Tosco, tras estrenar por el canal Cubavisión el videoclip de la canción Evita el coronavirus. No sé si El Tosco y sus músicos desconocían el precedente de la Sublime, pero la iniciativa de NG La Banda no hace más que marcar la continuidad de una idiosincrasia musical, satírica, irreverente, expansiva, con no pocos antecedentes en el cancionero popular cubano.

"La Orquesta Sublime era una de las charangas que le hacía competencia a la Aragón allá por el año 1959, cuando el chachachá estaba de moda para bailar, y grabó ese número para comentar una epidemia de fiebre asiática, que parece que así la bautizó el pueblo, pero que desde luego fue mucho más benigna que la 'otra epidemia' que ya estaba andando hacía rato en Cuba, y de la que todavía no nos hemos podido librar, la revolución de Fidel Castro", comentó el reconocido musicólogo Cristóbal Díaz Ayala, residente en Puerto Rico.

Fundada en 1956 por el violinista, arreglista y compositor Melquiades Fundora (1924-2008), la Orquesta Sublime impuso su estilo en pleno auge de agrupaciones como Arcaño y sus Maravillas, La Charanga Show de José Antonio Fajardo, Melodías del 40 y las Orquestas Aragón y Sensación, entre otras. En la historia de la música popular y bailable cubana, el historiador y realizador Toni Basanta considera que la Sublime es "una de las orquestas que más rápidamente ascendió en el gusto del público bailador".

El mismo año de su debut grabó sus dos primeros discos de larga duración, Sabor de Cuba y Rico Chachachá, y sus músicos se convirtieron en artistas exclusivos del sello Panart, discográfica intervenida por el régimen cubano en 1961. Junto con la Sublime, en aquellos años actuaron Benny Moré, Barbarito Diez y Elena Burke.

En 1959, la orquesta fue proclamada por la crítica como La Pachanguera de Cuba, a raíz del estreno de La Pachanga, un número del cubano Eduardo Davidson que devino uno de los éxitos históricos del conjunto. Con la Panart se produjo en 1960 el lanzamiento del sencillo doble de 78 RPM que contiene La Asiática y Con el Satélite.

En la década de los 60, la Sublime impuso sus ritmos alrededor del mundo desde Estados Unidos y América Latina hasta Europa. En Venezuela conquistó multitudes y alcanzó el Premio de la Popularidad en 1962. Su aceptación llegó también a África, donde recibió un Disco de Oro en 1994. La Orquesta ha renovado sus músicos, pero ha mantenido su formato de charanga y la base rítmica del chachachá, mezclándolo con elementos de rumba, sones, guarachas y boleros. En 2010, lanzó el álbum Sublime Havana, grabado en colaboración con el saxofonista alemán Klaus Roehm para la firma estadounidense Bembé Records y que entre otros números incluye Sabroso como el guarapo. "La agrupación lleva cinco décadas sobre los escenarios y aún mantiene plena frescura en su propuesta", escribió entonces el crítico Joaquín Borges Triana.

La sorprendente vigencia de un tema como La Asiática en tiempos de coronavirus pudiera impulsar acaso un nuevo repunte para la Orquesta Sublime, que ahora comienza a ser rescatada por admiradores, curiosos y sorprendidos internautas, como si revivir los acordes contagiosos de una guaracha sexagenaria animaran la certeza de que el mundo recobrará pronto la alegría.

Wilfredo Cancio Isla
Cibercuba, 29 de marzo de 2020.
Leer también: La olvidada gripe asiática de 1957.

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